El mercado cripto continúa bajo presión y XRP no escapa al ajuste. El token de Ripple cayó más de 30% desde su máximo de julio (cuando rozó los u$s3,66) y en la última semana retrocedió otro 12%, hasta moverse en torno a los u$s2,50, un nivel que se convirtió en el principal soporte psicológico del mercado.
El movimiento bajista coincidió con una ola de liquidaciones en los mercados de derivados y una fuerte reducción del interés abierto, que cayó casi un 50% en pocas horas.
Sin embargo, lejos de ser una señal de capitulación, los datos de volumen al contado, que aumentaron 40% en la jornada posterior al desplome, indican un retorno de la demanda institucional.
Precio de XRP: qué dice el análisis técnico
Los analistas técnicos coinciden en que el rango de u$s2,40–u$s2,50 es decisivo. Si XRP logra mantenerse por encima (al momento de esta redacción se sitúa en los u$s2,40), puede consolidar una base sólida para una recuperación hacia los u$s2,80–u$s3,00, donde se ubican las medias móviles de 50 y 200 días.
"Por ahora, se mueve dentro de una 'cuña descendente expansiva' que históricamente ofrece un 57% de probabilidad de ruptura al alza", señala a iProUP el analista financiero Rubén Peralta, cuya mirada coincide con lo expresado en redes por otros especialistas de diferentes partes del mundo.
"De confirmarse esa lectura, XRP puede encaminarse a una proyección cercana a los u$s9,50, con objetivos más ambiciosos en u$s20 y u$s27 dentro del actual ciclo", agrega Peralta. Es decir, el mercado espera que su precio se triplique al menos.
Para el analista Alfredo Valle, "la estructura macro sigue siendo alcista, ya que el precio se encuentra en su 'fase de confirmación' antes de un nuevo impulso".
El experto añade que el índice de fuerza relativa (RSI) "estocástico semanal en zona de sobreventa refuerza la hipótesis de un rebote técnico en las próximas semanas".
Ripple: cómo impacta su narrativa
Más allá del análisis técnico, la narrativa institucional vuelve a jugar a favor del ecosistema de Ripple. En los últimos meses, bancos centrales de Europa retomaron las pruebas con tecnologías de registro distribuido (DLT) para modernizar sus sistemas monetarios, y el Banco de Francia se colocó a la vanguardia de esos ensayos.
Desde 2016, la entidad trabaja en pilotos blockchain para mejorar la trazabilidad y automatización de datos dentro de la red SEPA. En su investigación sobre monedas digitales de bancos centrales (CBDC), el organismo mencionó explícitamente a XRP como posible base tecnológica para un euro digital, según un documento técnico citado por analistas.
Un informe de CPA Australia refuerza esa visión al identificar a Ripple como una de las plataformas más aptas para implementar una CBDC. Su infraestructura, capaz de procesar transacciones casi instantáneas, con bajo costo y alta eficiencia energética, se alinea con los requerimientos de estabilidad y escalabilidad de una moneda digital soberana.
A diferencia de Bitcoin o Ethereum, cuyo consenso depende de validadores distribuidos, el XRP Ledger opera con un modelo híbrido que prioriza la velocidad y previsibilidad, atributos valorados por las instituciones financieras.
Para un lector primerizo o que busca adentrarse en este mundo, datos como un avance tecnológico de esta envergadura son fundamentales. Usualmente, un token no va separado del proyecto que lo contiene. Son partes importantes de un todo, que es el que debe considerarse hasta el más mínimo detalle a la hora de hacer una inversión.
Interés creciente y señales de adopción real
La exploración de XRP por parte del Banco de Francia no implica una adopción inmediata, pero sí un reconocimiento del potencial tecnológico detrás del protocolo. Fuentes cercanas al sector sostienen que la interoperabilidad entre el sistema de pagos de Ripple y las infraestructuras tradicionales puede acelerar la digitalización del sistema financiero europeo.
En paralelo, Ripple anunció una alianza con Immunefi para realizar una auditoría de seguridad de su red (con una recompensa total de u$s200.000) entre el 27 de octubre y el 24 de noviembre. Este tipo de pruebas refuerza la confianza institucional y busca blindar el ecosistema ante el crecimiento esperado de las aplicaciones sobre el XRP Ledger.
Los analistas también destacan que la compañía mantiene una estrategia centrada en los pagos transfronterizos, con acuerdos en más de 70 países y asociaciones con bancos regionales que buscan reducir los costos de las transferencias internacionales. Este modelo de adopción tangible diferencia a XRP de otros tokens cuya demanda depende exclusivamente de la especulación.
De mantenerse la defensa del soporte en u$s2,40 y confirmarse un cierre semanal sobre u$s2,58 (nivel que coincide con la media móvil de 200 días), XRP puede recuperar tracción hacia los u$s3,20 en el corto plazo ( 30%).
Por debajo, una ruptura de ese nivel abriría espacio para una corrección hacia u$s2,25, aunque varios indicadores sugieren que el flujo comprador vuelve a imponerse.
En perspectiva, el proyecto de Ripple se consolida como un puente entre las finanzas tradicionales y la nueva economía digital. Su integración en los debates sobre monedas digitales de bancos centrales y el renovado interés institucional refuerzan la tesis de que, pese a la volatilidad, XRP podría ser uno de los grandes protagonistas de la próxima etapa del mercado cripto.