La facturación del canal online a nivel nacional experimentó en los primeros seis meses del año un aumento de 79%, consolidando el crecimiento de los hábitos digitales en el país.
Según el estudio MIDTerm realizado por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) y Kantar Insights, durante los primeros seis meses de 2025 se vendieron 203,9 millones de unidades, cifra que representa un crecimiento real de 49% respecto al mismo período de 2024.
El comercio electrónico en laArgentina alcanzó una nueva etapa de madurez, impulsado por un cambio significativo en los hábitos de consumo que privilegia las compras cotidianas.
El crecimiento se observa en la cantidad de compradores y también en la frecuencia de compra; el 74% adquirió algún producto o servicio durante los últimos seis meses, y casi la mitad (45%) lo hizo en el último mes.
Este comportamiento evidencia que el comercio electrónico dejó de ser una experiencia puntual para convertirse en un hábito de consumo regular.
El 13% de los encuestados hizo su primera compra online en el primer semestre de 2025, señalando la capacidad del canal para captar nuevos usuarios incluso en un mercado maduro.
Las categorías que impulsan el volumen de ventas en 2025 son aquellas que demandan una alta frecuencia de compra, como alimentos y bebidas, herramientas y construcción, así como hogares, muebles y jardín.
Alimentos y bebidas destaca como líder por tercer año consecutivo, y se consolida en marketplaces y servicios de entrega que facilitan su acceso.
Este fenómeno muestra cómo el consumidor argentino confía cada vez más en el canal online para resolver sus compras diarias, y supera la tradicional asociación del e-commerce con productos tecnológicos o de gran valor.
Para los comerciantes, el canal online representa ya 25% del total de las ventas en negocios digitales, una proporción significativa que confirma la integración comercial entre lo físico y lo digital.
El 60% de las empresas considera que el canal digital creció tanto o más que el canal físico, y refuerza la importancia de una estrategia omnicanal para no perder ventas.
En segmentos específicos como hogar, muebles y decoración, la participación online alcanza el 38%, cifra que supera ampliamente el promedio general y revela el potencial del e-commerce para sectores tradicionales.
La logística aún evoluciona para adaptarse a las preferencias de los consumidores, con un predominio marcado del envío a domicilio, elegido por el 53% de los consumidores.
El retiro en punto de venta mantiene una alta relevancia también, siendo la opción utilizada por el 42% de las marcas en sus entregas.
Estas modalidades reflejan la demanda del consumidor argentino por soluciones que priorizan la rapidez y conveniencia, obligando a las empresas a diversificar sus propuestas para mantenerse competitivas.
La consolidación de servicios logísticos eficientes es fundamental para mantener la confianza del consumidor y garantizar la repetición de compra.
Además, el crecimiento en el ticket promedio, que alcanzó los $102.449, con un incremento interanual de 23%, indica una mejora en la calidad y cantidad de productos adquiridos.
Un comercio electrónico sólido y bien gestionado representa un factor esencial para la economía digital local y un canal clave para abordar las necesidades de consumo en un contexto de incertidumbre económica.
El estudio revela que el comercio electrónico trascendió el modelo de compras esporádicas para posicionarse como un canal vital para las compras diarias y la gestión de necesidades recurrentes.
El crecimiento sostenido en facturación y volumen representa una métrica económica y también una transformación cultural en la forma en que los argentinos compran y consumen.
Para las empresas, esto significa que el canal online es un complemento, pero también una parte estratégica esencial en la estructura comercial.
La integración efectiva entre los canales físico y digital resulta fundamental para captar las oportunidades y cumplir con las expectativas del consumidor moderno.
La digitalización también favorece la inclusión económica, dando acceso a un mayor número de personas a productos y servicios de diversas categorías.
Finalmente, la innovación en experiencias de compra, logística y atención al cliente seguirá siendo crucial para mantener el liderazgo en un mercado dinámico y competitivo.