Bank of America anunció una revisión al alza de sus previsiones para el oro ubicando el precio en u$s5.000 por onza para 2026.
Esta estimación, que representa un salto significativo respecto a los valores actuales, posiciona al banco como el primero entre las grandes entidades financieras en anticipar un escenario tan optimista para el metal dorado.
Mientras que para la plata, la institución estimó que alcanzará los u$s65 por onza, con un promedio de u$s56,25. Ambos metales, tradicionalmente considerados refugios de valor, estarían beneficiándose de un contexto internacional marcado por desequilibrios fiscales, volatilidad política y presiones inflacionarias.
Según el informe difundido por el banco, uno de los principales motores detrás de esta proyección es el "marco político poco ortodoxo" de la Casa Blanca, que estaría contribuyendo a un entorno favorable para el oro. Además, el entorno económico global presenta varios factores estructurales que seguirán impulsando la demanda:
- Déficits fiscales persistentes que debilitan la confianza en las monedas tradicionales
- Aumento sostenido de la deuda pública, lo que genera presiones sobre los sistemas financieros
- Intentos por corregir el déficit de cuenta corriente, que reconfiguran los flujos internacionales de capital
- Migración de inversiones hacia activos considerados seguros, como el oro, en busca de protección frente a la volatilidad
No obstante, el banco también advirtió sobre la posibilidad de una corrección a corto plazo. A pesar del rally que llevó al oro a superar los u$s4.000 por onza en lo que va del año -un incremento del 50% respecto al año anterior-, los analistas señalan que la volatilidad podría generar ajustes temporales en los precios.
Sin embargo, la tendencia de fondo se mantiene firme, respaldada por factores estructurales que trascienden los movimientos especulativos del mercado.
Cómo invertir en oro desde la Argentina
Para los argentinos, invertir en oro ya no implica comprar lingotes ni pagar costosos servicios de custodia. Existen alternativas digitales y reguladas que permiten seguir el precio del metal desde una cuenta local o una billetera cripto.
CEDEARs y ETFs
La opción más tradicional es operar CEDEARs (Certificados de Depósito Argentinos), que permiten comprar desde la Bolsa local instrumentos listados en el exterior y en pesos.
Uno de los más populares es el CEDEAR del ETF SPDR Gold Shares (GLD), que replica el precio internacional del oro. Este certificado se negocia por alrededor de $9.900 y puede adquirirse con pesos.
Los CEDEARs ofrecen la ventaja de liquidez, simplicidad y respaldo regulatorio, aunque la rentabilidad también depende del tipo de cambio financiero (CCL), que suele acompañar los movimientos del dólar libre.
Criptomonedas respaldadas en oro
Una alternativa más reciente son las stablecoins de oro, activos digitales que representan fracciones de onzas de oro físico custodiadas por emisores certificados.
Entre las más conocidas figuran PAX Gold (PAXG) y Tether Gold (XAUT), ambas con respaldo en lingotes auditados y cotización igual al precio internacional del metal.
Estas monedas permiten invertir desde montos bajos, operar 24/7 y transferir valor globalmente, sin necesidad de almacenar físicamente barras o monedas.
Qué conviene más: CEDEAR o stablecoin de oro
Cada alternativa tiene su perfil. Los CEDEARs resultan más adecuados para inversores que buscan un marco regulado, liquidez local y respaldo bursátil, mientras que las stablecoins ofrecen mayor flexibilidad, fraccionamiento y rapidez operativa.
Desde un punto de vista estratégico, los expertos recomiendan combinar ambos instrumentos: mantener una parte del portafolio en CEDEARs para beneficiarse del esquema regulado local y otra en tokens de oro para aprovechar la dinámica global del ecosistema cripto.