Los grandes jugadores del sistema financiero global se mueven para no quedarse atrás frente al avance cripto.
Bank of America, Citi, Deutsche Bank, Goldman Sachs y UBS confirmaron la creación de un consorcio para evaluar el lanzamiento de stablecoins respaldadas por las monedas del G7, entre ellas el dólar, el euro y la libra esterlina.
El proyecto, según informó Reuters, busca integrar la tecnología Blockchain a la infraestructura bancaria tradicional. Los bancos apuntan a combinar la eficiencia y trazabilidad del sistema cripto con la estabilidad de las divisas fiduciarias más fuertes del mundo.
Según trascendió, el plan se encuentra en fase exploratoria y aún no tiene fecha de implementación. Sin embargo, marca un giro importante: la banca tradicional ya no mira a las criptomonedas como una amenaza, sino como una oportunidad para modernizar su sistema de pagos.
El cambio de postura llega tras la aprobación en Estados Unidos de la Ley GENIUS, el primer marco legal federal para emisores de stablecoins.
La normativa, que prioriza los tokens respaldados por el dólar, impulsó a las entidades financieras a acelerar su estrategia digital y adaptarse al nuevo entorno regulado.
El mercado de stablecoins atraviesa un crecimiento récord. Este año, su capitalización global superó los u$s300.000 millones, y Citi estima que podría alcanzar los u$S4 billones hacia 2030.
La entidad ya invirtió en la fintech británica BVNK —respaldada por Visa—, mientras Mastercard y Coinbase compiten por participar en la compañía.
Otros miembros del consorcio también avanzan con iniciativas propias. El CEO de Bank of America, Brian Moynihan, aseguró que el banco "se prepara para emitir su propio token". Deutsche Bank, en tanto, desarrolla un programa de tokenización de activos para integrar operaciones digitales dentro de su estructura.
Si la alianza prospera, las stablecoins emitidas por el sistema financiero tradicional podrían redefinir el modelo de pagos internacionales.
Estas monedas permitirían transferencias inmediatas, con costos mínimos y total transparencia, en un marco regulado que garantice seguridad jurídica.