El lunes, Bitcoin volvió a marcar su pico histórico o ATH (all time high) en u$s126.198, según Coinmarketcap, luego de pasar los u$s125.000 en la madrugada del domingo.
Pero no es la única criptomoneda: BNB, el token nativo del ecosistema Binance, atraviesa uno de los momentos más sólidos de su historia. En las últimas horas, su precio rompió el umbral psicológico de los u$s1.200 por primera vez desde su lanzamiento.
Así, alcanzó un ATH de u$s1.223 y consolidándose como la quinta criptomoneda más valiosa del mercado, con una capitalización superior a los u$s169.000 millones.
El avance no solo refleja el renovado apetito por las altcoins, sino también la madurez de un activo que combina utilidad, deflación y narrativa institucional, tres elementos que hoy sostienen su impulso.
Un modelo deflacionario que gana atractivo
Uno de los factores más determinantes detrás del ascenso de BNB es su mecánica deflacionaria. Desde 2023, Binance mantiene un sistema de "quemas trimestrales" de tokens que reduce progresivamente la oferta circulante. En la práctica, esto convierte a BNB en un activo con emisión neutra o negativa, una característica escasa dentro del ecosistema cripto.
"La estrategia contrasta con monedas que mantienen políticas inflacionarias (como Ethereum, en determinados períodos de red) y le otorga a BNB una ventaja estructural frente a la oferta creciente de competidores. Sumado a su utilidad directa dentro de la red BNB Smart Chain, consolida su demanda constante", analiza el asesor financiero Pablo Aguirre.
Desde la propia comunidad dejan en claro que la usabilidad del token es fundamental. "Los usuarios usan BNB para pagar comisiones con descuento, participar en lanzamientos de tokens, acceder a productos de staking y ahorro, y cubrir el 'gas' de las transacciones dentro del ecosistema", detalla a iProUP un holder del token.
"Esta combinación de incentivos mantiene una presión compradora sostenida incluso en fases de corrección general del mercado", subraya.
De las tensiones regulatorias al optimismo institucional
El repunte de BNB también coincide con un cambio en la narrativa regulatoria. Versiones recientes sobre posibles negociaciones entre Binance y el Departamento de Justicia de Estados Unidos para poner fin al período de supervisión impuesto en 2023 generaron optimismo entre los inversores.
Aunque la empresa no emitió comunicados oficiales, la especulación sobre un posible cierre del capítulo judicial y hasta un eventual regreso de su fundador Changpeng Zhao (CZ) al frente de la compañía, alimentó el sentimiento alcista.
En paralelo, Binance logró estabilizar su cuota de mercado tras un año complejo, manteniendo liderazgo en volumen spot y derivados, y consolidando su presencia en el segmento institucional. Ese escenario reforzó la idea de que BNB es uno de los grandes beneficiarios de la "rotación de liquidez" hacia altcoins de gran capitalización.
Señales técnicas: entre la consolidación y el descubrimiento de precios
En términos de análisis técnico, BNB muestra un patrón de continuidad alcista sostenido por la demanda. El token rebotó con fuerza desde los u$s1.147 y mantuvo una estructura de máximos ascendentes.
"La resistencia inmediata se ubica en torno a los u$s1.223 (su máximo histórico), mientras que el siguiente objetivo natural se proyecta en los u$s1.300", explica a iProUP el analista de mercados Emiliano Luque.
"Una ruptura clara por encima de ese nivel podría abrir paso a un movimiento más agresivo hacia los u$s1.500, siempre que el volumen acompañe y no se produzcan ventas masivas de toma de ganancias", agrega el experto.
Sin embargo, no todo el escenario es optimista. El índice de fuerza relativa (RSI) muestra una ligera divergencia bajista, lo que podría anticipar episodios de corrección a corto plazo. Si la presión vendedora aumenta, los soportes clave se ubican en u$s1.147 y u$s1.046, niveles que, de ser respetados, consolidarían una base técnica sólida para un nuevo impulso.
"Es uno de los activos más operados la última semana, a nivel de Bitcoin y Ethereum", resume con entusiasmo sobre BNB a iProUP Federico Ogue, CEO de Buenbit.
Para otros analistas consultados, BNB está en una posición estratégica dentro del ciclo actual. "El token se consolidó como una alternativa seria dentro del top-5 y su comportamiento replica el patrón de las grandes alzas de 2021", sostiene Lautaro Velásquez.
Otros apuntan a que el rally todavía no mostró signos de agotamiento. "Si mantiene el soporte en torno a los u$s1.180 y supera los u$s1.300, el movimiento podría extenderse hasta los u$s1.500 o incluso más antes de fin de año", destaca Rodrigo Mansilla.
Desde una perspectiva más prudente, algunos observan un posible "enfriamiento" temporal por toma de ganancias, especialmente si el RSI continúa en zona de sobrecompra. Aun así, el consenso general coincide en que BNB atraviesa una etapa de validación estructural, respaldada por fundamentos técnicos y por la evolución de su red.
Actividad on-chain y fortaleza de la red
Más allá del precio, los indicadores on-chain refuerzan la lectura positiva. La red BNB Chain mantiene una actividad sostenida, con un volumen semanal de más de u$s25.000 millones en exchanges descentralizados (DEX), según datos de DeFiLlama.
El valor total bloqueado (TVL) en la red superó los u$s8.800 millones, tras rebotar desde los mínimos de mitad de año, y si bien aún está por debajo de su récord de u$s20.000 millones en 2021, muestra una tendencia de recuperación consistente.
En paralelo, los contratos de futuros sobre BNB alcanzaron un nuevo máximo de u$s2.540 millones en interés abierto, reflejo del creciente interés especulativo e institucional. Sin embargo, este aumento también eleva el riesgo de liquidaciones forzadas en caso de retrocesos abruptos.
El escenario base de los analistas es que BNB mantendrá su rango entre u$s1.150 y u$s1.300 durante octubre, consolidando su estructura antes de un eventual quiebre. Un cierre semanal por encima de los u$s1.220 confirmaría el reinicio del ciclo alcista y abriría la puerta a un nuevo descubrimiento de precios.
En el mediano plazo, la narrativa que rodea a Binance (sumada a la escasez estructural del token y al repunte general de las altcoins) puede llevar a BNB hacia los u$s1.500, e incluso u$s1.700 ( 40%) si las condiciones macro acompañan.
Con su dominio en alza, un modelo deflacionario probado y un ecosistema que continúa expandiéndose, BNB se perfila como una de las grandes protagonistas de este ciclo cripto. Su evolución dependerá ahora de un delicado equilibrio entre liquidez, sentimiento y resistencia a las presiones regulatorias.