El activo, que inició la mañana de este viernes en una situación compleja, repuntó con el correr de las horas y los inversores siguen cada movimiento
22.08.2025 • 12:06hs • MUNDO CRIPTO
MUNDO CRIPTO
Una ballena compró u$s300 millones en XRP y su precio volvió al alza
:quality(75):max_bytes(102400)/https://assets.iproup.com/assets/jpg/2023/11/37040.jpg)
El ecosistema cripto está en plena ebullición, y XRP, el token de Ripple, es una de las altcoins protagonistas de este momento, donde los inversores siguen todos sus pasos.
Según trascendió con los datos de la cuenta de X de Whale Alert, una ballena movió una suma millonaria de monedas de este activo, lo que despertó la idea de un posible rally alcista.
Con un posteo en X, la cuenta publicó que se realizaron algunas transferencias cercanas a los u$s300 millones, lo que puso en alerta a los inversores, quienes esperan un rebote en el precio de la altcoin.
XRP volvió al alza
Y como clara señal positiva de esta ilusión, al momento de redactar esta nota, según los datos de la pizarra de Binance, XRP cotiza al alza en torno a los u$s3,01, con una suba del 7,16% en la última hora y del 3,59% en el último día.
Sin embargo, en la mañana de este viernes, el token de Ripple luchaba por mantenerse en la zona de los u$s2,90, más allá del impacto de la presión de venta.
Pero más allá de esta mañana complicada que atravesó, en un mercado volátil, ahora el valor del activo repuntó, además de ciertas señales técnicas en un contexto donde la regulación de las criptomonedas va en ascenso.
Una ballena despierta la ilusión
Según publicó la cuenta de X previamente citada, un flujo de grandes cantidades de XRP se movió hacia direcciones privadas, lo que llamó la atención de analistas y traders.
Este movimiento se realizó con 4 transferencias de 25 millones de tokens cada una, desde la plataforma Bitstamp, lo que sumó un total de 100 millones de XRP, o unos u$s300 millones.
Es por eso que estas transacciones representan un fuerte movimiento de la altcoin, lo cual podría interpretarse como una acumulación estratégica del token por parte de un inversor.
Además, el timing no fue casualidad: esta compra se concretó cuando el valor de la criptomoneda era de u$s2,83, por lo que esta ballena aprovechó la caída del token.
No obstante, el flujo neto de las ballenas se mantiene en terreno negativo, por lo que puede interpretarse que otros grandes jugadores aún se están deshaciendo de sus posiciones, según los datos de CoinGlass.
Por último, más allá de esto, el sentimiento generalizado es positivo y se cree que el token podría protagonizar un cambio en su equilibrio entre oferta y demanda, además de que en la mayoría de los casos, cuando una ballena compra esa cantidad de monedas, suele venir aparejado con un rebote en su precio.
