Las acciones de Coinbase (COIN), una de las exchanges más importantes del planeta, alcanzaron un máximo histórico de u$s444,64 el pasado 18 de julio de 2025, impulsadas por una combinación de factores regulatorios, tecnológicos y de mercado que consolidan a la plataforma como uno de los actores más influyentes en el ecosistema financiero digital.
El repunte se produjo apenas horas después de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobara tres leyes clave para el sector: la GENIUS Act, la CLARITY Act y la Anti-CBDC Act, que brindan un marco regulatorio claro para las stablecoins, las exchanges y la supervisión de activos digitales.
El CEO de Coinbase, Brian Armstrong, celebró públicamente la aprobación de la GENIUS Act, calificándola como una "revolución financiera para América" y una validación del rol que las criptomonedas pueden desempeñar en la modernización del sistema financiero.
La ley exige que las stablecoins estén respaldadas por bonos del Tesoro estadounidense, lo que podría aumentar la demanda institucional y beneficiar directamente a la empresa, que opera como custodio de múltiples emisores y facilita transacciones con estos activos.
Además del impulso legislativo, el rally de las acciones coincidió con un nuevo máximo histórico de Bitcoin, que superó los u$s123.000, y con una capitalización total del mercado cripto que rebasó los u$s4 billones.
Esta correlación directa entre el precio de BTC y el rendimiento de COIN refleja el creciente interés institucional por el sector, especialmente tras la incorporación de Coinbase al índice S&P 500 en mayo, lo que abrió la puerta a inversiones desde fondos de pensión y grandes gestoras de activos.
Coinbase también fortaleció su estratégica mediante adquisiciones como la de Deribit, una plataforma líder en derivados cripto, y el lanzamiento de su nueva aplicación Base, que integra redes sociales, pagos en USDC y miniaplicaciones en una sola interfaz.
Esta expansión hacia servicios financieros y de consumo apunta a diversificar sus fuentes de ingresos más allá del negocio tradicional de exchange, que ya representa más de u$s1.200 millones trimestrales.
Con una capitalización bursátil que superó por primera vez los u$s100.000 millones, la firma se consolida como una de las exchanges más valiosas del mundo y una de los principales referentes de la Web3.
Analistas del sector estiman que, si se mantiene el impulso regulatorio y el crecimiento del mercado cripto, las acciones de COIN podrían superar los u$s500 antes de fin de año.