El Gobierno enfrentará este miércoles 9 de julio un compromiso clave: el pago de u$s4.200 millones a bonistas privados.
Pese al feriado del Día de la Independencia, el Ministerio de Economía y la Secretaría de Finanzas destacaron que ya tienen los dólares listos para cumplir con el vencimiento.
El desembolso incluye intereses y amortizaciones, y se espera que una porción significativa de ese capital vuelva al mercado local. Al menos, eso sotienen los analistas, quiénes subrayan que los bonos argentinos son atractivos en la región, por lo que muchos inversores optarán por reinvertir.
Aunque las reservas netas del Banco Central (BCRA) siguen siendo limitadas, en líneas generales, hay un escenario de calma.
¿El motivo? El ajuste fiscal y la estabilidad macro brindan soporte a los precios de los bonos, y el mercado empieza a especular con un posible triunfo oficialista en las legislativas de octubre.
Si ese escenario se concreta, podría haber una baja del riesgo país que dispare las cotizaciones.
¿Hay un clima favorable para reinvertir en bonos argentinos?
Dentro del abanico de opciones, los bonos de más largo plazo son los que generan mayor expectativa.
En ese contexto, el Global 2035 (GD35) y el Global 2041 (GD41) aparecen como las opciones con mayor potencial de crecimiento, en caso de que el riesgo país ceda en los próximos meses.
Este entusiasmo también se refleja entre los grandes jugadores internacionales, como Bank of America que eligió reforzar su inversión en títulos argentinos, en especial el GD35.
Para la organización, a pesar de la mejora en las cuentas públicas, estos bonos siguen rindiendo cerca de 11%, algo que implica "un premio por riesgo político y financiero".
El economista Leo Anzelone, asesor financiero del CEPEC, explicó que muchos tenedores de bonos están dispuestos a volver a colocar los fondos que cobren este 9 de julio: "La expectativa de baja en el riesgo país genera un clima favorable para continuar el recorrido alcista", resaltó.
Sin embargo, no todos hacen la misma lectura. Para el asesor financiero, Gastón Lentini, la cercanía con las elecciones y el cronograma de pagos que viene podrían enfriar el ineterés por activos más riesgosos.
¿Las elecciones de octubre aparecen como el gran rival del Gobierno?
Según otros especialistas, ante el actual escenario, muchos inversores optarían por mantener dólares en mano o ir a posiciones más conservadoras, como fondos money market.
Desde Portfolio Personal Inversiones (PPI) recomiendan una cartera mixta que incluya AL30, GD35 y GD41, combinados con títulos de más corto plazo, para equilibrar riesgo y retorno ante una eventual compresión del riesgo país.
Mientras tanto, para los perfiles más conservadores, los instrumentos en pesos siguen ganando terreno.
Las Lecaps, en particular, se presentan como una opción tentadora para quienes buscan liquidez y tasas reales positivas.
"Las Lecaps permiten rendimientos por encima de la inflación con flexibilidad para salir en cualquier momento", explicó Anzelone.