A medida que las criptomonedas se consolidan como medio de transacción y activo de inversión, los bancos centrales aceleran el desarrollo de sus propias monedas digitales.
Esto ha llevado a las plataformas financieras globales a prepararse para facilitar el intercambio de las CBDC, las cuales son las monedas digitales emitidas por los bancos centrales.
La red bancaria mundial SWIFT se encuentra en proceso de crear una nueva plataforma que permitirá la conexión entre las monedas digitales emitidas por los bancos centrales y el sistema financiero global en los próximos uno o dos años.
La iniciativa de SWIFT, crucial para el ecosistema financiero, se perfeccionará con el lanzamiento de las primeras medidas importantes.
Cerca del 90% de los bancos centrales a nivel mundial exploran versiones digitales de sus monedas, buscando no quedarse atrás ante el avance de las criptomonedas.
El jefe de innovación de SWIFT, Nick Kerigan, destaca el éxito de las pruebas, que involucraron a una amplia colaboración global sobre CBDC y activos "tokenizados".
Estas pruebas se enfocaron en garantizar la interoperabilidad de las CBDC de diferentes países, reduciendo los riesgos de fragmentación del sistema de pagos.
Los resultados demuestran la capacidad de las CBDC para agilizar pagos comerciales y reducir costos de procesos, lo que impulsa a SWIFT a desarrollar una hoja de ruta para su lanzamiento en los próximos 12 a 24 meses.
Aunque el calendario puede variar, tener la plataforma a tiempo fortalecerá el liderazgo de SWIFT en las redes transbancarias, en un contexto donde países como Bahamas, Nigeria y Jamaica ya cuentan con CBDC en funcionamiento.
China también está avanzada en las pruebas del e-yuan, y el Banco Central Europeo está desarrollando el euro digital.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) sugiere que la adopción del dinero digital, tanto público como privado, podría ser beneficioso para mejorar la inclusión financiera.
Así como la calidad de los servicios financieros en las naciones más alejadas y dispersas del océano Pacífico.
Recientemente, el FMI emitió un informe detallando el potencial impacto de las stablecoins y las monedas digitales de los Bancos Centrales (CBDC) en las economías de los países de las Islas del Pacífico.
En dicho informe, los expertos económicos resaltan los desafíos que enfrentan estas naciones, como el acceso desigual a los servicios financieros y la dependencia de los flujos de remesas.
De esta manera, el FMI sostiene que la adopción de soluciones de dinero digital podría ayudar a estos países a desarrollar sistemas de pago eficientes.
Así como ampliar la inclusión financiera y mitigar la pérdida de relaciones bancarias internacionales.