El consejo directivo de la Asociación Bancaria declaró el estado de alerta y movilización a nivel nacional debido a la posible venta del Banco HSBC al Grupo Financiero Galicia o a un fondo de inversión.
Además, solicitaron a ambas entidades bancarias que prioricen la preservación de los empleos y el respeto de los derechos laborales adquiridos. La AB denunció que tuvo conocimiento de esta situación a través de reportes periodísticos y presentó una queja ante la Secretaría de Trabajo de la Nación el 11 de marzo, sin obtener respuesta hasta la fecha.
La Bancaria expresó su descontento ante el gobierno libertario por su falta de respuesta a las demandas planteadas. Ante esta situación, pidieron reuniones directas con los líderes de las entidades pertinentes. Este anuncio fue realizado en un comunicado firmado por el secretario General, Sergio Palazzo, y el de Prensa, Claudio Bustelo.
Así como el HSBC y el Grupo Galicia declararon que el acuerdo aún no está finalizado, reconocieron estar en proceso de negociaciones que se harán conocidas una vez definidas.
Fuentes del Grupo Galicia negaron planes de despidos masivos, pero consideran la posibilidad de adelantar jubilaciones y abrir un registro de retiros voluntarios. Sin embargo, enfatizaron que especular antes de tiempo no ayuda a la situación del país; en caso de llegar a un acuerdo, convocarán al sindicato para discutir la situación del personal.
Mientras tanto, La Bancaria reiteró su preocupación por la incertidumbre y la ansiedad que esta situación provoca entre los empleados del HSBC Bank Argentina. En respuesta, anunciaron el estado de alerta y movilización en todo el territorio nacional.
En caso de que la transacción se lleve a cabo, el Grupo Financiero Galicia ascenderá al segundo puesto como la entidad financiera más grande del país, después del Banco Nación. Actualmente en el tercer lugar, superará al Banco Provincia en activos, con una suma que supera los $7.928 billones.
Además, La Bancaria sigue llevando a cabo la campaña de recolección de firmas en contra de la privatización propuesta por el presidente Milei para el Banco Nacional (BNA).
El sindicato se mantuvo un estado de alerta después de enterarse de que el asesor presidencial Federico Sturzenegger comunique al Directorio del Banco Nación para que convierta la entidad en una Sociedad Anónima.
Se explicó que la intención es apoyarse en el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/23, que fue rechazado en el Senado y está pendiente de tratamiento en la Cámara de Diputados.
Este decreto fue objeto de críticas de diversos sectores y enfrenta desafíos legales. En este sentido, La Bancaria condenó la interferencia en el ámbito de la banca pública.
Con el lema "El Banco Nación no está en venta", los trabajadores bancarios llevaron a cabo una serie de protestas, contando con el respaldo de líderes de las tres principales organizaciones sindicales del país: la CGT, la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma.