En un esfuerzo por fomentar prácticas ecológicas en la minería de criptomonedas, la plataforma descentralizada Hathor Network (HTR) ha establecido una asociación con Cryptogranjas, una empresa minera de bitcoins con sede en Argentina.
Esta colaboración tiene como objetivo promover el uso de energías renovables y ofrecerá una recompensa de 16 HTR por bloque minado en lugar de los habituales 8 HTR, con el propósito de incentivar la preservación del medio ambiente.
Cryptogranjas emplea la conversión de biomasa residual en energía para alimentar las computadoras encargadas de realizar la minería.
Según explicó Jim Sarasola, director ejecutivo de Cryptogranjas, el enfoque se centra en la transformación de residuos agroindustriales, como los excrementos de ganado vacuno y de pollo, en una fuente de energía.
Esta práctica no solo ayuda a reducir la emisión de gases de efecto invernadero, sino que también aprovecha recursos que de otro modo se desperdiciarían en la atmósfera.
Esta iniciativa de fomento a la minería con energías renovables complementa el compromiso medioambiental de la blockchain brasileña.
Es relevante destacar que los tokens Hathor se validan a través de un proceso denominado "minería fusionada", lo que elimina la necesidad de un consumo adicional de energía para extraer tokens HTR.
De hecho, los bloques de HTR se descubren simultáneamente con los de Bitcoin, lo que minimiza el impacto ambiental de la actividad minera.
Diego Guareschi, el director de Marketing de Hathor, enfatizó que la plataforma utiliza el mecanismo de consenso prueba de trabajo (proof of work), el cual es reconocido como uno de los más seguros y probados en el mundo criptográfico.
Sin embargo, a diferencia de Bitcoin, Hathor no genera un consumo extra de energía, lo que la convierte en una opción más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
Esta innovación no solo garantiza la seguridad de la red, sino que también promueve prácticas energéticamente eficientes en la industria de las criptomonedas.
La alianza entre Hathor Network y Cryptogranjas representa un paso significativo hacia la sostenibilidad en la minería de criptomonedas en América Latina.
Al combinar tecnología de vanguardia con prácticas ambientales responsables, ambas empresas están contribuyendo activamente a la construcción de un futuro más limpio y sostenible para la industria blockchain.