El hombre que asegura ser el verdadero creador de Bitcoin y quien reclama la identidad de Satoshi Nakamoto, Craig Wright, publicó una carta en la que planteó una oferta pública a Crypto Open Patent Alliance (COPA).

En su carta, Wright propone evitar un juicio previsto para febrero de este año, sobre los derechos de propiedad intelectual de Bitcoin (BTC) y en el que él está obligado a demostrar que realmente es el creador seudónimo de Bitcoin, Satoshi Nakamoto.

El mes pasado, un juez del Reino Unido le dijo a Wright que presente ante el tribunal copias impresas de 95 documentos que datan de 2007. Según los abogados de Wright, estas supuestas pruebas estaban almacenadas en una unidad USB y demostrarían que él es Nakamoto.

"En febrero, debo enfrentarme a un grupo de individuos y entidades corporativas en el Tribunal Superior de Londres, donde tengo la intención de defender mis derechos de propiedad intelectual sobre Bitcoin como su creador", expresó Wright.

Además, añadió: "El enfoque de mis diversos litigios hasta la fecha nunca ha sido revelar mi identidad seudónima como Satoshi Nakamoto, sino exigir que Bitcoin permanezca fiel a sus principios centrales".

La carta pública de Craig Wright

En esta carta, de público conocimiento, Wright indica, "acepto renunciar mis derechos de base de dato y a mis derechos de autor (…) y ofrecer una licencia irrevocable a perpetuidad, a mis partes opuestas que controlan, operan y/o colectivamente poseen esas bases de datos".

 

La oferta formulada por Wright propone poner fin a todos los reclamos legales en la demanda, y que cada parte sea responsable de sus costos legales. También, pide a los desarrolladores y demás protectores de Bitcoin que se centren en su tecnología y que no permitan nuevas bifurcaciones.

En caso de que los miembros de COPA acepten el acuerdo, también renunciarán a cualquier posibilidad de usar los medios de comunicación para hablar en contra de Wright.

De todas formas, la carta que Wright envió a COPA, para algunos especialistas demuestra que llegó el momento de poner punto final a la batalla legal que hubo en torno a la identidad de Satoshi Nakamoto.

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