Manuel Adorni, vocero del presidente, afirmó que las provincias cuentan con la libertad de tomar decisiones respecto a la posible emisión de cuasimonedas, pero destacó que no serán rescatadas por el Gobierno nacional, a diferencia de la situación en 2001 y 2002 tras la emisión masiva durante la crisis de la convertibilidad.
Adorni minimizó la preocupación por un "efecto contagio" en otras provincias, ya que la mayoría comprende la necesidad de no gastar más de lo disponible y está ajustando sus finanzas en consecuencia.
Al ser preguntado sobre si el Gobierno nacional estaba molesto por la medida, indicó que "cada provincia tiene la libertad de hacer lo que considere correcto, y si considera correcto pagar a los empleados públicos con papeles emitidos por la propia provincia, bienvenido sea".
"No nos preocupa, son decisiones estrictamente provinciales y jamás van a ser rescatadas por el Gobierno nacional", resaltó el funcionario en la tradicional conferencia de prensa diaria que brinda en Casa Rosada.
Y agregó: "Si no hay intención de ajustar las cuentas públicas, la cuasimoneda, si ve la luz, la verá dentro de la valoración que cada ciudadano haga de ese papel".
La vicegobernadora de La Rioja, Teresita Madera, explicó que la aprobación de la cuasimoneda en la provincia, denominada Bono Cancelación de Deuda (Bocade), tiene como objetivo evitar la pérdida del poder adquisitivo de la población en respuesta a la situación económica de los últimos meses.
"Va a ser una herramienta que va a gozar de la confianza y va a cumplir el objetivo que hemos planteado: que la gente no pierda el poder adquisitivo", comentó Madera a FM Urbana Play.
La Legislatura de La Rioja aprobó el miércoles el proyecto que contempla la emisión de $15.000 millones en Bocades, destinados a cubrir el 30% de los salarios de los trabajadores del sector público.
"El restante del 70% (del salario) la gente lo va cobrar en pesos. El bono va a tener circulación en los comercios de La Rioja y para pagar impuestos", puntualizó Madera.
En desacuerdo con la propuesta, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, rechazó de manera categórica la posibilidad de emitir una nueva moneda en su provincia.
"Flaco favor le haríamos a esta gestión nacional emitiendo una moneda propia", expresó Frigerio en conferencia de prensa, tras destacar la tarea que lleva adelante el presidente Javier Milei y su Gabinete por "enfrentar al flagelo de la inflación".
El mandatario entrerriano expresó su preocupación por los niveles actuales de inflación en Argentina, pero subrayó que la creación de nuevas monedas no es una solución viable y consideró que no es una idea acertada.
"Tenemos problemas, encontramos vacías las arcas provinciales pero entendemos que hay otra forma de solucionar esto", manifestó Frigerio. Y comentó que las cuasimonedas "retrotraen a un momento de la historia económica argentina que no es una buena idea repetir".
En la misma línea, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, afirmó que "no es sano para la economía que cada uno cree una moneda".
"Al problema de depreciación de nuestra moneda que sufren todos los argentinos, agregarle una cuasimoneda no es una buena salida", consideró Cornejo en diálogo con Radio Mitre.
Además, el líder mendocino indicó que, más allá de la cuestión de si es legal o no, un asunto que la Justicia deberá determinar, está claramente prohibido por la Constitución.
Luego, Cornejo sugirió que detrás de la propuesta de crear una moneda regional hay un intento de llamar la atención por parte de Quintela, a quien acusó de tener problemas con el pago de salarios en su provincia y de tratar de desviar la responsabilidad culpando a la Nación.
"Hay provincias que han hecho su esfuerzo de equilibrio fiscal, como Mendoza, que está en equilibrio hace siete años, que tiene un 10% menos de empleados públicos, que tiene un sector productivo muy robusto", comentó Cornejo.
Por el lado peronista, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, enfatizó que su provincia "no tiene planes de emitir una cuasimoneda" dado que "mantiene un equilibrio en sus finanzas".
El líder tucumano señaló que la emisión de cuasimonedas suele ser una medida necesaria, pero también perjudicial para la población, ya que implica descuentos en su valor nominal, sin recibir el pago completo que representa el billete.
En el caso del PRO, la diputada nacional María Eugenia Vidal se unió a las críticas hacia la cuasimoneda y expresó su opinión de que esta determinación podría acarrear "consecuencias legales".
Vidal destacó que la Constitución Nacional establece que solo el Banco Central tiene la facultad de acuñar moneda. Por lo tanto, consideró que si el gobernador Quintela lleva a cabo la emisión de esa moneda, estaría actuando de manera inconstitucional.
Finalmente, el economista y exdirector del Banco Central, Enrique Szewach, evaluó que la implementación de una cuasimoneda en La Rioja "constituye, por ahora, un caso singular derivado de una extensa historia de deficiente gestión en algunas provincias, que han priorizado el fomento del empleo público en detrimento de la inversión privada".
Szewach comentó en CNN Radio que Quintela está optando por "este método de compensar parte de los salarios con bonos para los empleados públicos, lo cual es esencialmente una reducción de sus ingresos".
"La Rioja es un caso particular porque es una provincia que tiene muy poca actividad privada y mucha pública, y depende mucho de la coparticipación federal o de alguna transferencia discrecional", expresó Szewach .
Y agregó: "Como la coparticipación federal se cayó porque los propios riojanos votaron para sacar el impuesto a las Ganancias, en medio del plan electoral de Sergio Massa, y además la devolución del IVA, la recaudación se cayó sobre todo en diciembre".