Cada vez son más los entusiastas que se conectan a la red de Bitcoin (BTC) para obtener recompensas derivadas de las ganancias que muestre la principal criptomoneda del ecosistema.
En vísperas de un año prometedor para la moneda digital, se dio a conocer que la tasa de hash de BTC alcanzó un nuevo máximo histórico el 25 de diciembre.
La tasa de hash, o hashrate, es una medida de la potencia computacional utilizada para minar criptomonedas en redes de prueba de trabajo (PoW). Cuanto mayor sea la tasa, más cálculos se pueden realizar por segundo, algo que aumenta las posibilidades de minar un bloque con éxito.
El día de Navidad, el hashrate de la criptodivisa alcanzó un máximo histórico de 544 exahashes por segundo (EH/s), según datos de Blockchain.com.
El pico se da como consecuencia de la duplicación que vislumbraron los valores de hash de la red a lo largo de todo el 2023, con un incremento mayor al 130% desde enero.
El aumento va en consonancia con el rally mostrado por el propio valor de Bitcoin, el cual subió más de 150% desde el 1 de enero de este año.
Will Clemente, cofundador de la consultora Reflexivity Research, hizo referencia al ascenso del gráfico de hash en escala logarítmica y remarcó que "la prohibición de la minería en China en el verano de 2021 es apenas un problema menor. Imagina desvanecer la red monetaria de código abierto descentralizada más segura del planeta; no podría hacer eso".
Una tasa de hash alta representa puntos favorables para los modelos teóricos de precios, como el precio ajustado al hash implícito o en términos de seguridad; ya que la red se muestra más fuerte y segura, lo que dificulta que se produzca un ataque del 51%.
El precio del hash suele dispararse cuando la demanda es elevada, lo que provoca elevadas comisiones por transacción, como sucedió durante el reciente frenesí dado por el rally que mostró el criptoactivo entre octubre y noviembre de este año.
Sin embargo, la contraparte de esta escalada la sufren los mineros, quienes deben trabajar más para asegurar el siguiente bloque: A medida que aumenta el hashrate, los mineros deben esforzarse más para asegurar el siguiente bloque y obtener recompensas, lo que produce mayores costos operativos.
De todas formas, los mineros de Bitcoin registraron ingresos más altos gracias al furor por los Ordinals, un protocolo que permite desarrollar tokens no-fungibles (NFT) sobre la red Bitcoin.
Datos de The Block revelaron que las ganancias de estos mineros se duplicaron en los últimos 12 meses, al pasar de u$s601 millones a más de u$s1.200 millones.
El nuevo pico histórico de la tasa de hash se da en vísperas del halving, un evento programado que ocurre cada cuatro años que reduce a la mitad la recompensa que reciben los mineros por validar transacciones y agregar nuevos bloques a la cadena de bloques de Bitcoin.
El efecto consecuente, dado por la disminución de la oferta, es una disparada en los valores del mercado, como ocurrió durante el último halving en 2020.
Además, se espera la inminente aprobación de múltiples fondos cotizados en bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) de Bitcoin al contado en Estados Unidos durante las primeras semanas de enero, algo que produjo un nuevo entusiasmo en torno al ecosistema en las últimas semanas.