El martes, las acciones experimentaron una disminución significativa hasta alcanzar niveles mínimos de varios meses debido a la inquietud de los inversionistas en relación con el impacto duradero del aumento de las tasas de interés en el mercado de valores.
A las 12:30 p.m. EDT, el Promedio Industrial Dow Jones, el S&P 500 y el índice tecnológico Nasdaq experimentaron caídas de aproximadamente un 1% cada uno, influenciadas por datos mensuales que revelaron ventas de viviendas nuevas y niveles de confianza del consumidor más bajos de lo anticipado.
Este declive del martes situó a los tres principales índices bursátiles en sus niveles más bajos respectivos desde junio, y tanto el S&P como el Nasdaq están en camino de registrar su peor desempeño mensual en septiembre de 2023.
La disminución relacionada con las tasas puede parecer un tanto confusa, considerando que la Reserva Federal detuvo su ciclo de alzas la semana pasada.
Sin embargo, esto ocurre a medida que el mercado evalúa las señales cada vez más sólidas de la Fed y otros bancos centrales de que las tasas permanecerán elevadas durante los próximos años, superando las expectativas previas.
En lugar de sentirse "aliviados por la perspectiva de la ausencia de futuros aumentos, los inversores muestran aprensión, e incluso cierto temor", explicó el martes Craig Erlam, analista de Oanda.
Empresas como Apple, Microsoft, Alphabet y Amazon registraron caídas de alrededor de 2% cada una, con Apple alcanzando su cotización más baja desde el 25 de mayo.
Durante la abrupta caída del martes, numerosas acciones alcanzaron sus niveles más bajos en un año, según datos de FactSet.
No obstante, el Promedio Industrial Dow Jones y el S&P 500 cerraron la rueda con ajustes de 0,47% y 0,27%, respectivamente.
Entre las empresas afectadas se encuentran la minorista en línea china JD.com, la inmobiliaria y la minorista estadounidense Nordstrom.
Los estrategas de JPMorgan liderados por Marko Kolanovic explicaron en una nota a sus clientes por qué un aumento en las tasas de interés perjudica a las acciones.
Argumentaron que la persistente resistencia de los consumidores genera una inflación persistente y la necesidad de mantener políticas restrictivas, lo que a su vez comprime los márgenes de beneficio, debilita la salud financiera de las empresas y pone fin al crecimiento.
Las preocupaciones de la Reserva Federal también afectaron al mercado de bonos: los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a 10 años alcanzaron su nivel más alto desde 2007 el lunes y se mantuvieron en el 4,54% el martes.
En su reunión de la semana pasada, el Comité de Política Monetaria de la Reserva Federal optó por mantener las tasas de interés en el rango de 5,25% a 5,5%, pero aumentó considerablemente sus previsiones para las tasas de fondos federales en 2024 y 2025.
Esto generó preocupación sobre la capacidad de los estadounidenses para navegar con éxito en el actual entorno macroeconómico, con recortes significativos en las tasas a corto plazo, lo que plantea interrogantes para los inversores que buscan políticas más favorables al crecimiento.