Strike, una compañía de pagos especializada en Bitcoin (BTC), comenzó una iniciativa para habilitar pagos con esta criptomoneda a más de 3.000 millones de personas en todo el mundo.
La compañía informó su expansión a 65 países, incluyendo naciones latinoamericanas como Brasil, Ecuador, Guatemala, Honduras y Paraguay.
La empresa, liderada por Jack Mallers, ya opera en la Argentina, El Salvador y su país de origen, los Estados Unidos.
Esta expansión permitirá que más personas tengan acceso a una nueva gama de servicios financieros, con el objetivo de posicionar a Strike como una plataforma global comparable a aplicaciones como Venmo o Cash App, pero con enfoque en criptomonedas.
El movimiento busca brindar a los usuarios la oportunidad de disfrutar de los beneficios y las opciones que ofrece este tipo de tecnología financiera.
La plataforma facilita la transferencia instantánea de dinero en efectivo y Bitcoin, además de la compra de BTC y pagos internos entre usuarios.
Strike utiliza Lightning Network, una red secundaria que permite transacciones de Bitcoin más económicas y rápidas, para brindar servicios de pagos globales y transferencias de dinero transfronterizas. También es compatible con la moneda estable USDT.
A través de un comunicado, Mallers, el fundador y CEO comentó: "Todos en el planeta Tierra deberían tener fácil acceso a dinero que los gobiernos no puedan inflar y una red de pagos que no pueda ser influenciada por intermediarios".
Y agregó: "Las economías de mercados emergentes se han visto afectadas durante mucho tiempo por la incertidumbre financiera, la inflación y los servicios depredadores que amenazan la capacidad de las personas para ahorrar, invertir y lograr la estabilidad financiera. Bitcoin soluciona esto".
Strike anunció que su ampliación, la cual abarca países como Bután, Kenia, Nueva Zelanda y Uganda, ampliará significativamente su mercado objetivo y alcanzará a aproximadamente 3.000 millones de personas en total.
Manuela Ríos, vicepresidenta de producto de Strike, comunicó en una entrevista con CoinDesk: "Nuestro objetivo final es llegar a los 7.000.000 a 8.000.000 de personas en cada país".
Además de estas iniciativas, la empresa reveló su decisión de trasladar su sede global a El Salvador.
Strike, que fue una de las primeras compañías de criptomonedas en obtener una licencia para operar en este país centroamericano, optó por esta mudanza en medio de la incertidumbre regulatoria y el creciente enfoque agresivo de las autoridades en los Estados Unidos.
Dentro de las proyecciones a largo plazo, Mallers también compartió su intención de lanzar nuevas características, como una tarjeta de débito, para fines de este año.