Según fuentes próximas a la compañía, y luego de la segunda ronda de financiación que permitirá que su valor se eleve a 650 millones de dólares, la salida a Bolsa será un hecho en 18 meses.
Esta promesa de salir al mercado es uno de los argumentos que los ejecutivos de Glovo utilizan para tentar a los inversores en los diversos roadshows. En julio la firma logró captar 115 millones mientras que el foco está en expandirse en Latinoamérica a la vez que refuerza su equipo de software.
Sin embargo el panorama de inversión en startups españolas tiene una incógnita a resolver: la salida a Bolsa o posible fusión de Cabify. La aplicación de alquiler de taxis sondeó el mercado para concretar la operación a fin de este año pero los problemas de regulación en Barcelona y Madrid, sumado a la debilidad de los mercados de capitales, hicieron que se posponga.
El nucleo de accionistas está compartido entre Glovo y Cabify, entre ellos se encuentran el gigante japonés de tecnología Rakuten, el fondo español Seaya Ventures y Amres.