"Los desafíos de ciberseguridad empeorarán en 2023 y las firmas deberán estar preparadas", fue, palabras más, palabras menos, la conclusión a la que arribaron los analistas y principales referentes en ciberseguridad durante el evento CPX 360 organizado por Check Point del que participó iProUP.
Gil Shwed, Founder & CEO, Check Point, detalló que "estamos en el año de la revolución del 2023". "Ahora todo es digital. Sin embargo, el 38% de los dispositivos sufrieron ataques informáticos", precisó.
El especialista subrayó que "muchas empresas invierten en seguridad pero al no estar coordinados sus acciones no funcionan cómo se espera".
Yoav Chelouche, Managing Partner en Aviv Venture Capital, mencionó: "Esto es la Matrix real, en los últimos 3 años sufrimos más de 3000 ataques. Ahora es tiempo de trabajar en nuevas formas de seguridad, como por ejemplo, unificar las formas de ataques".
El experto remarcó que la consolidación, la colaboración y la comprensión forman el ataque clave para hacer frente a las amenazas.
"La comprensión puede facilitar el entendimiento a las diferentes amenazas, con la buena toma de decisiones pudimos prevenir 2,1 billones de ataques al año. Todos los días se previenen 2 billones de ataques", precisó Chelouche.
A su vez, el especialista apuntó que es "fundamental comenzar a trabajar en la organización de la prevención".
"Por eso, queremos presentar Horizon XDR/XPR que abarca todas las áreas de seguridad, tanto para prevenir como para remediar el daño que pueden ocasionar", añadió.
En el evento también se presentaron las soluciones Quantion Titan, que abarca tecnología autónoma con Inteligencia Artificial, y Cloud Guard, para proteger la información que se guarda en la nube.
Otros de los temas que se trató fue el ChatGPT, un sistema de chat basado en el modelo de lenguaje por Inteligencia Artificial GPT-3, desarrollado por la empresa OpenAI.
Es un modelo con más de 175 millones de parámetros, y entrenado con grandes cantidades de texto para realizar tareas relacionadas con el lenguaje, desde la traducción hasta la generación de texto.
A una inteligencia artificial se la entrena a base de texto, se le hacen preguntas y se le añade información, de manera que este sistema, a base de correcciones a lo largo del tiempo, va entrenando para realizar de forma automática la tarea para la que ha sido diseñada.
Por ejemplo, con el uso de la inteligencia artificial. "Lo primero es poder entrenarla en la prevención de los ataques más comunes. Pero yo imagino que esta tecnología puede avanzar, incluso más que nosotros, pensemos en que se puede tener todo un centro trabajando en esto. Algo fácil de entender, con un road map definido", completó Manor.