El dólar Qatar aún no está en vigencia pero ya despierta debates. El motivo es muy sencillo: faltan algunos días para que se produzca el corte de buena parte de las tarjetas de crédito y con ello que se comience a aplicarlo.
No obstante, por estos días está abierta la polémica acerca de la posibilidad fáctica de aplicarlo, pues como suele suceder habitualmente, apenas se conoce una medida restrictiva se pone en marcha toda la maquinaria para evitarla.
En este caso, al menos en teoría la escapatoria vendría por el lado de utilizar diferentes plásticos y si es mejor de varias entidades bancarias y Fintech.
La apuesta pasa por la posibilidad aún no comprobada de que la AFIP no estaría en condiciones de cruzar la información.
Por ende de controlar todo al mismo tiempo, mientras que las entidades aducen que se trata de un operativo muy difícil de implementar.
Si finalmente el organismo de control logra su objetivo, queda abierta otra opción para tratar de licuar, aunque sea parcialmente, el impacto del dólar Qatar en el bolsillo de los viajeros o de quienes compran bienes en el exterior.
Curiosamente, esta opción se ajusta a las intenciones del Gobierno en cuanto a la creación de este tipo de cambio diferencial, pues su objetivo es que las cuentas se paguen con dólares de los contribuyentes y no con reservas del Banco Central.
El dólar Qatar sigue dando que hablar pese a que en la práctica todavía no está funcionando a pleno
Si bien con la existencia de múltiples tipos de cambio existe la posibilidad de hacer diferentes combinaciones, en el caso del dólar Qatar la más interesante es la que se lo hace jugar con el blue.
Es precisamente ese blue que durante años fue subestimado por los diferentes funcionarios que consideran casi como un mantra que "se trata de un mercado muy pequeño, con muy poca incidencia en el mercado", pero que ahora es la tabla de salvación para evitar daños mayores.
La cuestión es que por esas curiosidades que ofrece el mercado cambiario, su precio se ubica muy por encima del blue y los financieros, como el dólar MEP, lo cual en definitiva no es una casualidad o feliz coincidencia.
Dicho de otra manera, es el propio Gobierno el que de alguna manera alienta la compra de dólares paralelos.
Apenas entró en vigencia el dólar Qatar, este cotizaba a $316,2, mientras que el blue lo hacía a $291 y el dólar MEP a 297 pesos.
Si se compraba el dólar marginal para el pago de la tarjeta, el ahorro que se obtenía era del 8%, mientras que si se optaba por el dólar MEP, se habría ganado un 6 por ciento.
Pero con el paso de los días, sucede algo que no estaba en el radar de los analistas, es decir que el blue baje algunos pesos y que obviamente el dólar Qatar suba al ritmo que le marca el dólar oficial.
Es por ello que según los últimos datos disponibles, con un blue en baja a $287 y el Qatar a $317,50, el rulo permite ahorrar prácticamente un 10 por ciento por un simple pase de manos.
En la medida que el blue cotice por debajo del dólar Qatar, se mantiene la posibilidad de aliviar el pago de éste último al vencimiento de la tarjeta
Más allá de este cálculo, debe tenerse en cuenta que este nuevo dólar se encarece debido a la nueva percepción del 25% a cuenta de Bienes Personales, que se suma al 30% en concepto de Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) y el 45% como adelanto al Impuesto a las Ganancias.
Según el analista financiero Salvador di Stefano "la medida invita a los turistas a pagar con dólares billetes en vez que con tarjeta", lo que provocaría una mayor demanda sobre los tipos de cambios alternativos, que terminará presionando sobre la cotización".