Luego de los anuncios que dio el ministro de Economía, Sergio Massa, marcaron distintos análisis respectos a qué puede pasar en los meses siguientes con la inflación.
Con respecto al mes de julio, se estima que contará con una inflación récord para las últimas décadas, aproximadamente al 8%, según las percepciones del propio Gobierno.
Trás estos pronósticos, está en duda si el corriente año 2022 terminará con una inflación de 85% a 90% o si alcanzará la cifra de tres dígitos, situación que no estaba en los cálculos de nadie.
A partir de estas estimaciones, se elaboró un informe que examina cuántas horas hay que trabajar para hacer toda clase de compras: desde compras habituales (por costumbre), complejas (mayor evaluación del producto), o hasta compras no planeadas.
La consultora Focus Market decidió tener como referencia el ingreso manual de un sueldo medio y las horas que se necesitaría trabajar para comprar: bienes que uno adquiere (alfajor, atado de cigarrillos, café), productos de menor frecuencia (combo de hamburguesa, par de zapatillas, celular), y también servicios como una salida de ocio y esparcimiento (cine).
Un ejemplo notorio para comprender un poco más es: si compramos un café para llevar todos los días, debemos trabajar más de 10 horas (más de 1 día laboral) para poder abonar, cobrando un salario medio de $113.214.
Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market, remarcó que "la aceleración inflacionaria en Argentina en los últimos meses, sumado a la devaluación del peso frente al dólar en el último mes y medio, en un contexto de restricciones a las importaciones, generó que para obtener ciertos bienes en la economía, los argentinos deberían destinar más horas de trabajo para poder compensar la pérdida del poder adquisitivo de su ingreso frente a la evolución de precios".
A su vez, podemos sumar otro ejemplo. "Si comemos los 4 viernes del mes un combo de hamburguesa, debemos trabajar más de 8 horas (más de 1 día laboral) para poder afrontar el gasto, cobrando un salario medio", subrayó.
Según el informe, el sector público en un contexto de déficit fiscal e incremento del gasto público, incrementó los salarios en forma interanual en 71,7% por encima de lo sucedido en el sector privado con un alza promedio interanual del sector asalariado registrado del 63%.
Además, el director agregó: "En muchas categorías y rubros como son el caso de servicios gastronómicos, textil, calzado e informática, los aumentos interanuales estuvieron en el rango de entre 85% y 95% interanual. Son más horas de trabajo para cumplimentar la adquisición de los mismos bienes".
Este panorama incierto llevó a muchos a replantearse sus estrategias de ahorro e inversion para darle pelea a la inflación, que llegó a 36% en el primer semestre (los analistas vaticinan más de un 80% para 2022). En este contexto, algunos instrumentos resignaron protagonismo:
En el marco actual de suba de precios, dejar los pesos durmiendo en una caja de ahorro tampoco se presenta como algo favorable, al igual que otras modalidades tradicionales.