Gucci, la marca italiana de productos de lujo, confirmó que agregó a la criptomoneda ApeCoin de BAYC como forma de pago en varias de sus tiendas ubicadas en los Estados Unidos.
El gigante de la moda con sede en Florencia, que comenzó a aceptar criptodivisas a principios de mayo en un intento de atraer a más clientes de criptomonedas tras el mercado alcista de 2021, comunicó mediante un tuit que ya se pueden comprar sus productos con la altcoin APE.
De esta forma, los clientes podrán pagar por la ropa y otra mercadería de lujo de la marca usando ApeCoin en los almacenes seleccionados.
Según informó la marca, sus clientes pueden pagar a través de un código QR que se les envía por correo electrónico.
La integración se lleva a cabo en asociación con el procesador de pagos BitPay, que se encarga de procesar los pagos en criptomonedas de Gucci y cambiarlos a moneda fiduciaria si la empresa lo desea.
Pero la estrategia no es una estrategia aislada, sino que parece formar parte de un plan más amplio de Gucci para sumergirse en la Web3.
Además de adoptar los criptopagos, la firma de diseño también lanzó varias colecciones de tokens no fungibles (NFT) e incursionó en el metaverso con la compra de terrenos virtuales y su propios juegos en Roblox.
Gucci también se unió recientemente a la organización autónoma descentralizada (DAO) detrás del mercado NFT SuperRare, adquiriendo 150.000 tokens RARE, con un valor de aproximadamente u$s31.000 en ese momento, como recuerda The Block, lo que le otorgó derechos de gobierno dentro de esa comunidad.
El puntapié inicial lo dio Bitcoin (BTC): descentralizó el dinero online al permitir operaciones persona a persona (P2P) sin intermediarios. Su tecnología blockchain permitió que las transacciones sean:
Vitalik Buterin y Gavin Wood crearon en 2015 Ethereum, una red que añade una capa de programación para permitir lo que Bitcoin no podía hacer hasta el momento: correr software.
Así, la blockchain añadió los llamados contratos inteligentes: programas que hace que ciertas acciones se automaticen. Es decir, no hay participación humana, dando lugar a las aplicaciones descentralizadas o Dapps.
"Al no existir una figura única que controle los datos de los usuarios, logramos un sistema con mayor privacidad. Desaparece la figura explotadora de datos que vimos en el surgimiento de las bigtech", remarca a iProUP Ezio Rojas, Social Media Manager de Parity Technologies.
Esa empresa es la pata técnica detrás de Polkadot, red que permite la interoperabilidad de blockchains y diseñada por Wood, el ingeniero que programó Ethereum y creó la Fundación Web3.
Maximiliano Hinz, director de operaciones de Binance, remarca a iProUP que "hasta ahora no había posibilidad de participar en el manejo de nuestros datos, debíamos cederlo a un tercero".
"Con servicios descentralizados, repartimos esa información en pedacitos más pequeños en mucha gente y, además, podemos verificar que se mantenga privada", remarca. También se promueve la seguridad de la información, que "dependía de una sola empresa cuando uno cedía su información o dinero", subraya Rojas.