La batalla legal entre Elon Musk y Twitter parece que recién comienza. Sobre todo, luego que el propio CEO de Tesla solicitara a sus abogados que prorroguen el inicio del juicio hasta el año entrante.
En este contexto, una jueza ordenó que la demanda de la compañía contra Elon Musk por su acuerdo de adquisición de u$s44.000 millones vaya a un juicio de cinco días en octubre próximo.
La magistrada tomó la decisión sobre el final de la primera audiencia del caso, la cual analizaba si justamente el proceso debía acelerarse.
Días después de que Musk buscara rescindir el acuerdo, Twitter presentó la demanda e incluyó una moción para acelerar el proceso.
La empresa, además, solicitó un juicio de cuatro días en septiembre. En este caso, el equipo legal de Musk se opuso al pedido elevado por la red social del pajarito.
El abogado principal de Twitter, William Savitt, arremetió contra Musk al comienzo de la audiencia, y argumentó que era necesario implementar "un juicio rápido".
Savitt resaltó que la continua incertidumbre que se cierne sobre la empresa por el acuerdo en vilo y el litigio "afecta a Twitter todos los días, cada hora y cada día".
También destacó lo que describió como el continuo menosprecio de Musk hacia Twitter, incluso en su propia plataforma.
"Musk estuvi y sigue estando obligado por contrato a hacer sus mejores esfuerzos para cerrar este trato", mencionó Savitt.
"Lo que está haciendo es exactamente lo contrario: es sabotaje", enfatizó.
El viernes pasado, los abogados de Musk acusaron a Twitter de falsear las cifras sobre cuentas falsas por lo que quieren que el juicio se retrase al menos hasta el 13 de febrero de 2023.
El fin es poder tener tiempo para recopilar información sobre los datos del bot en disputa, según documentos judiciales presentados ante el tribunal de Delaware, en los Estados Unidos.
"La disputa central sobre las cuentas falsas y de spam es fundamental para el valor de Twitter", escribieron los abogados de Musk en la presentación de 14 páginas.
Asimismo, explicaron en el documento que "también es extremadamente intensivo en hechos y expertos, lo que requiere un tiempo considerable para el descubrimiento".
Musk acordó comprar el sitio por u$s44.000 millones en abril, pero se retiró de dicho acuerdo la semana pasada luego de afirmar repetidamente que Twitter podría estar mintiendo sobre qué porcentaje de sus usuarios son bots.
Los defensores de Twitter criticaron en su demanda presentada el miércoles 12 de julio como un intento de "mala fe" de alejarse del acuerdo.
Sin embargo, desde el principio, los abogados de Musk calificaron la solicitud de Twitter como una "oferta de expedición extrema" injustificable y acusaron a la compañía de "una búsqueda del tesoro de dos meses de retrasos, cuellos de botella técnicos, respuestas evasivas y, en última instancia, negativas".
Según cuenta el propio Musk revisores humanos tomaron muestras al azar de 100 cuentas por día (menos del 0,00005% de los usuarios diarios) y aplicaron estándares no identificados para concluir de alguna manera cada trimestre durante casi tres años que menos del 5% de los usuarios de Twitter eran falsos o spam.