Alexandr Wang tiene solo 25 años, pero muchos analistas ya lo comparan con Elon Musk, fundador de Tesla y SpaceX, y Jeff Bezos, creador de Amazon.
En Silicon Valley lo siguen de cerca ya que su empresa logró una capitalización de u$s1.000 millones en tiempo récord.
Por eso, comienza a ser una de las caras favoritas de las revistas de economía y emprendedores exitosos.
Wang es hijo de inmigrantes chinos y fue criado en la base militar de Nuevo México, la misma en la que fue ideada la bomba atómica.
"Les dije a mis padres que esto iba a ser algo que solo haría durante el verano. Obviamente, nunca más volví a la escuela", admitió a fines de mayo pasado a Forbes.
En aquella publicación se lo definió como el nuevo "milmillonario" hecho a sí mismo más joven del mundo.
Wang tenía 19 años cuando creó su empresa, Scale Al, compañía de San Francisco que irrumpió con fuerza en la industria tecnológica gracias a sus avances en el etiquetado masivo de datos.
De forma vertiginosa, la firma se convirtió en el proveedor de decenas de empresas que consiguen mejorar los sistemas de inteligencia artificial gracias a la optimización ofrecida por sus herramientas.
Algunas de las empresas que actualmente utilizan sus servicios son: Uber, Airbnb, Toyota, PayPal o General Motors.
Incluso, el ejército estadounidense se sirvió de su tecnología de análisis para determinar, por ejemplo, el daño causado por las bombas rusas en territorio ucranio durante los meses de guerra.
Un dato interesante es que en mismo verano que fundó Scale AI, consiguió que la aceleradora Y Combinator -madre de otras empresas emergentes como Dropbox, Twitch o Airbnb- invirtiera en el proyecto.
Un par de años después, Wang consiguió que su nombre aparezca en la lista de los jóvenes menores de 30 más ricos del mundo.
"Mis padres lograron con su trabajo tener un impacto significativo en nuestra forma de entender el mundo", destacó en una presentación Ted en abril pasado.
Y añadió: "Por eso decidí convertirme en programador, para marcar yo también la diferencia en el planeta", completó.
Cuando cumplió los 17 años, se mudó de Nuevo México a San Francisco y entró a trabajar en Snap y Quora en el área de codificación; rápidamente mostró su talento y capacidad que lo hizo líder tecnológico en Quora sin estar en la universidad ni tener un título.
Creció en Nuevo México, con el Laboratorio Nacional de Los Álamos, donde Estados Unidos desarrolló su primera bomba atómica durante la Segunda Guerra Mundial, como parte de su vida.
Los padres del joven trabajaron por años en el desarrollo de proyectos de armas para el ejército, con este tipo de influencia detrás de él, Wang comenzó a desarrollar proyectos similares desde que fundó su empresa startup, llamada Scale AI, en 2016.
Establecida en San Francisco, la empresa levantó $4.7 millones y empezó a trabajar con inteligencia artificial con humanos seleccionados para hacer tareas subcontratadas como el reconocimiento de imágenes y la transcripción de audio.
A los 19 años, Wang fundó Scale Al junto a su amiga y compañera Lucy Guo.
La idea surgió gracias a la necesidad de ofrecer servicios de calidad durante sus trabajos con Snap y Quora.
Cuando comenzó con el desarrollo de la firma, Wang abandonó su lugar en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), donde estaba en el primer año de la carrera de aprendizaje automático.
¿El motivo? Enfocarse plenamente en el futuro de Scale Al. Por los resultados obtenidos, al parecer, no se equivocó.