Japón ordenó a las exchanges ubicadas en su territorio que bloqueen todas las operaciones de criptomonedas relacionadas con personas o entidades de Rusia y Bielorrusia y así evitar que estos países escapen a las sanciones por la invasión a Ucrania.
El Ministerio de Finanzas y la Agencia de Servicios Financieros del país asiático publicaron una serie de recomendaciones para el sector nacional de las criptodivisas dirigidas a evitar que estos activos digitales puedan emplearse para sortear el aislamiento financiero.
La medida alcanza tanto al mercado de Bitcoin, token no fungibles (NFT) y otras monedas virtuales.
De esta forma, las casas de cambio japonesas estarán obligadas a paralizar transferencias de criptoactivos si existe "la sospecha" de que su destinatario puede ser objeto de esas sanciones, según el comunicado del regulador financiero nipón.
El incumplimiento de estas medidas podría conllevar multas de hasta un millón de yenes (unos u$s8.000) y penas de hasta tres años de cárcel, según advirtieron las autoridades nacionales.
Japón, en el marco del G7, ha aplicado un amplio listado de sanciones financieras a Rusia y Bielorrusia que incluyen el bloqueo de activos de los líderes de ambos países, Vladímir Putin y Alexander Lukashenko, así como de otros altos cargos, la exclusión del sistema de transferencias SWIFT de entidades rusas o el veto a las exportaciones de semiconductores y otros bienes.
La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, aseveró que muchos miembros de la UE no dijeron que vayan a imponer restricciones al petróleo y al gas ruso, similares a las medidas que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, pero anticipó que habría una "gran prohibición" para las inversiones europeas en todo el sector energético de Rusia.
Las agencias reguladoras y los departamentos gubernamentales de muchos países que promulgan este tipo de medidas económicas contra el Kremlin también adivirtieron a los individuos y a las empresas que comercian con criptografía de posibles acciones de aplicación.
Por su parte el Departamento de Justicia de los Estados Unidos formará un nuevo grupo de trabajo destinado a congelar o confiscar las tenencias de criptomonedas de los individuos rusos ricos, así como a investigar los bancos y las empresas de criptodivisas detrás de ayudar a las entidades nombradas bajo sanciones con el lavado de dinero.
En el Reino Unido, la Autoridad de Conducta Financiera y la Oficina de Implementación de Sanciones Financieras emitieron una declaración conjunta en la que advierten a las criptoempresas que "desempeñen su papel para garantizar el cumplimiento de las sanciones".
"Las regulaciones de las sanciones financieras no diferencian entre los criptoactivos y otras formas de activos", explicaron los reguladores del Reino Unido. "El uso de criptoactivos para eludir las sanciones económicas es un delito", añadieron.
Las medidas económicas contra Rusia fueron rápidas y afectaron a muchos sectores. Empresas privadas como la cadena de comida rápida McDonald's, el importante banco Goldman Sachs y compañías de tarjetas de crédito como Visa y Mastercard cortaron sus vínculos con el país en los últimos siete días.