Con la nueva conformación del Congreso, la Argentina tiene el primer diputado "libertario", según el propio Javier Milei indicó en su cuenta de Twitter al momento de asumir.

Antes de su debut como funcionario, el mediático economista venía impulsando una propuesta que, a su entender y de de muchos colegas, reduciría buena parte de los problemas que padece el país: eliminar el Banco Central, institución a la que acusa de ser el origen de la inflación endémica de la Argentina.

La iniciativa fue vitoreada por quienes se autodenominan "libertarios". En este sentido, ya existe un "mundo" con un sistema económico sin una autoridad central y que funciona sin mayores sobresaltos.

De hecho, Bitcoin y otras monedas digitales se apoyan, justamente, en la llamada descentralización: la gobernanza de la red se basa en consensos y en el poder de sus usuarios. Se trata de una suerte de democracia virtual y la que varias personalidades  (incluyendo a quienes se los sospecha de haber la divisa) profesan la doctrina libertaria.

Así, la criptoeconomía avanza y consigue cada vez más adeptos. Se estima que ya hay más de 3 millones argentinos que poseen alguno de estos activos. No sólo eso: se podría decir que la nación albiceleste conforma el "C-10", la elite de los 10 países con mayor adopción de divisas virtuales, señalan desde Chainalysis, empresa que se dedica al análisis de transacciones en la blockchain.

Kim Grauer, directora de Research de Chanalysis, afirma a iProUP que la "Argentina tiene un mercado general de criptomonedas valuado en u$s68.800 millones, muy por encima de los u$s28.300 millones de Venezuela" y sólo superado en la región por Brasil, con u$s90.900 millones. Además, afirma que los usuarios locales mueven u$s3.300 millones en criptoactivos al año.

Si las divisas digitales están tan arraigadas en el país y su uso empieza a familiarizarse, ¿podría el país adoptar esta innovación y cumplir el sueño libertario de prescindir de un banco central?

Decisiones y autoridades

El Banco Central emite resoluciones sobre política monetaria que deben ser aceptadas por los actores del ecosistema financiero. Sin embargo, para la moneda digital líder eso no existe. En su lugar, están las Bitcoin Improvement Proposal (BIP), es decir, sugerencias de los propios usuarios para mejorar el protocolo.

"Cada documento reúne comentarios de la comunidad y se busca consenso para las decisiones. Existen tres tipos: seguimientos de normas, informativos y procesos", explica a iProUP Matías Bari, CEO y cofundador de Satoshi Tango.

"Si bien las resoluciones del Banco Central y las propuestas de Bitcoin buscan ser claras, transparentes y mejorar las políticas y el sistema, en las BIP hay una participación muy importante de la comunidad. Ojalá pueda aplicarse algo así en el BCRA en un futuro cercano", completa.

En este sentido, Manuel Beaudroit, CEO de Belo, advierte a iProUP : "Los jugadores del ecosistema financiero no tienen un canal abierto con el BCRA para mejorar el sistema. Lo más parecido son las Mesas de Innovación, en las que se presentan iniciativas de los principales actores".

Nahuel Burbach, experto cripto e integrante del proyecto de inversiones Zerion, asegura a iProUP: "Las BIP son públicas, abiertas a todos y se aprueban a través del consenso", a diferencia de las medidas del BCRA que son verticales y de cumplimiento obligatorio.

También señala que las mejoras en Bitcoin demoran más, pues existe "un mayor análisis de propuestas para así asegurar una implementación beneficiosa y más previsibilidad del sistema a largo plazo".  A efectos comparativos:

Satoshi Nakamoto, pseudónimo de la persona o equipo que creó Bitcoin, publicó en 2008 el White Paper o Libro Blanco donde sentó las bases de una "versión puramente electrónica de efectivo". El Banco Central, por su parte, cuenta con la Carta Orgánica, que fija el funcionamiento de la entidad.

"Se pueden encontrar algunas similitudes, ambas son el puntapié inicial", afirma a iProUP Gabriel Vago, del exchange ArgenBTC, quien explica:

"Gavin Andresen es uno de los pioneros de la moneda digital y fundador de Fundación Bitcoin, que busca proteger y promover su uso en el mundo. Es una de las caras principales", dice el directivo.

Emisión

Se trata de uno de los puntos más opuestos entre el funcionamiento de una economía con banco central y un sistema basado en divisas virtuales.

"En el caso de Bitcoin, está prefijada: habrá 21.000.000. Tal certeza puede crear algo superador al sistema actual. Una moneda fiduciaria, como el peso, está atada a la política monetaria", señala Beaudroit.

Vago coincide: "El Central debería aprovechar esta característica, ya que aporta muchísima claridad y seguridad en temas inflacionarios y de estabilidad económica. El hecho de que pueda fijar una política de emisión transparente y perdurable en el tiempo sería un avance importantísimo", remarca.

El tope fue prefijado para evitar la especulación y la inflación dentro del ecosistema. Cabe recordar que la emisión de Bitcoin baja a la mitad cada cuatro años, lo que se conoce como Halving, que ocurrió por última vez en mayo de 2020. "Al principio, se liberaban 50 Bitcoin cada 10 minutos, ahora es 6,125 bitcoins", señala Vago.

A modo comparativo, en todo 2021 se estima que:

La única diferencia es que la emisión de Bitcoin fue planeada desde que salió a la luz hace más de 12 años: actualmente, su ritmo es de 900 BTC por día.

Minería

Algunas divisas virtuales, como Bitcoin, tienen la figura del "minado" para obtener nuevas monedas. Se trata de personas o empresas que ponen a disposición del ecosistema su equipamiento, validan las operaciones que escriben en la cadena de bloques y dan robustez a la red.

"A través de su proceso liberan nuevo 'oro', pero también son los 'escribanos' que registran las operaciones en los bloques, que luego se incorporan a la Blockchain", explica Vago.

Bari coincide en esta analogía y agrega: "La minería tradicional consiste en remover tierras con maquinaria pesada para obtener el mineral que permita pagar los costos de explotación y obtener ganancias. En Bitcoin es prácticamente lo mismo, salvo que el equipamiento consta de equipos informáticos".

Así, al ser "creadores" de riqueza, los mineros generan divisas, insumo clave para un banco central: las reservas en diferentes monedas son una herramienta fundamental de política monetaria.

"Una alternativa que podría ser implementada rápidamente y que puede poner a la Argentina como foco en innovación es destinar un pequeño porcentaje de las reservas a divisas virtuales previamente analizadas con el fin de explorar e implementar la tecnología", advierte Burbach.

En este punto, el Banco Central "tomó conocimiento" de la existencia de activos criptográficos en mayo de 2014 y advirtió a la población sobre la volatilidad. Ese año, las reservas cerraron en u$s31.500 millones, por lo que:

Bancos y exchanges

Los exchanges o casas de cambio, según Beaudroit, son quienes se encargan de "proveer liquidez" y son "la puerta de entrada para que la gente se haga del activo".

"En el mundo del dinero fiduciario hay dos proveedores de liquidez: el Banco Central, con las emisión primaria; y los bancos, que en general son los puntos en los que accede al mercado de pesos", señala el experto.

En tanto, Burbach añade que los exchanges "son una mezcla entre bancos y sociedades de bolsa, ya que permiten realizar la compra y custodia de activos, pero también el acceso a diferentes herramientas financieras para sacar provecho a los activos".

"Permiten a los usuarios pueden comprar, vender, o intercambiar sus cripto por otras cripto o dinero fiduciario. Tienen muchos puntos en común con los bancos e incluso cobran tarifas por las transacciones, como las comisiones bancarias", agrega Bari.

Circulación

El Banco Central tiene entre sus funciones la de vigilar la circulación de dinero dentro de la economía. Así, la base monetaria (dinero en manos del público y los bancos) en la Argentina ronda los 3,42 billones de pesos (u$s19.300 millones al solidario).

En tanto, en Bitcoin existen hasta el momento 18,9 millones de monedas, por un total de u$s3.345 millones, con un total de operaciones diarias de u$s31 millones. Pero esa divisa virtual tiene una herramienta que todo banco central envidiaría.

"El Bitcoin se rige por su gran libro contable, la blockchain, en el que quedan asentadas las operaciones de toda la comunidad. Esto permite que sean completamente trazables", afirma Vago.

Burbarch añade que las cuentas en Bitcoin "no están asociadas a datos personales de ni de ningún tipo, por lo que tienen un aceptable nivel de privacidad pero no son 100% anónimas, y existen otras monedas para este objetivo".

"Si se logra conocer la identidad de una de las direcciones intervinientes en una operación se la puede rastrear. En cambio, el uso de dinero fiduciario en efectivo es 100% anómimo", completa Vago.

Sin embargo, el anonimato funciona en las operaciones entre particulares. Las fintech que ofrecen servicios de monedas virtuales deben cumplir con regulaciones "KyC" (conozca su cliente) y de prevención al lavado de dinero y financiamiento del terrorismo.

En este sentido, Bari remarca que "los usuarios tienen que revelar su identidad para cobrar, recibir bienes o servicios" y añade que "en SatoshiTango hacemos eso en el proceso de verificación de cuenta de cada usuario, con foto del DNI o prueba de domicilio".

"Cada operación tiene su comprobante, al igual que en el mundo 'real'. Si tenés un problema en un banco, te acercás al sector comercial para que lo resuelvan. Con nosotros funciona igual", explica el ejecutivo.

Por otra parte, cualquier persona puede rastrear una transacción de Bitcoin siempre que posea la clave pública (similar al CBU bancario) de un usuario a través de sitios como Blockchain Explorer.

Otra ventaja que señala Burbach es que "Bitcoin permite transferir sin importar la ubicación geográfica y a costos mínimos, mientras que dinero fiat limita a las partes a estar en un mismo lugar y es costoso de trasladar".

Todavía es utópico pensar que Bitcoin concretará el sueño libertario. Pero varios países -como Francia, Suecia y China- avanzan en crear sus propias monedas, aunque controladas por un banco central. Lo único cierto es que blockchain será la plataforma del dinero 4.0.

Te puede interesar