El ETF fondo ProShares Bitcoin Strategy (BITO) debutó en octubre pasado en Wall Street con un rotundo éxito y fue clave para que Bitcoin (BTC) repuntara su cotización y marcara un nuevo récord superior a u$s66.000 por unidad.

Gracias a este tipo de herramientas, los usuarios pueden apostar por contratos de futuros de BTC respaldados por CME Group (empresa estadounidense de mercados globales) y que replican el valor de la criptomoneda más famosa de todas sin la necesidad de adquirir directamente el activo digital.

En el caso de BITO, este se guía por el precio de Bitcoin, por lo cual sus usuarios obtendrán ganancias si BTC sube de precio, o perderán si ocurre lo contrario.

Pero un informe elaborado por la firma contable Ernst & Young reveló que el 31% de los gerentes de fondos de cobertura planificaron la inversión en Bitcoin y otras criptomonedas en el corto plazo.

Según la investigación, un 24% de los inversores alternativos y un 13% de los fondos de capital privado contemplan la inclusión de las criptomonedas en sus respectivos portafolios (individuales o de sus empresas) en un lapso de entre uno y dos años.

Dentro de este ecosistema, aquellos que manejan fondos entre u$s2.000 millones y u$s10.000 millones son los que muestran mayor disposición de incorporar las criptomonedas en sus planes de inversión.

El dato brindado por Ernst & Young es un índice alentador para quienes apuestan por las criptomonedas a largo plazo, pese a la caída registrada por BTC y las que mayor capitalización de mercado poseen.

El ETF fondo ProShares Bitcoin Strategy (BITO)

Cuáles son las ventajas de invertir en este tipo de activos?

Este es el problema que algunos expertos le ven al boom de los nuevos ETF

Estrategas de JPMorgan Chase & Co. advirtieron que la demanda reprimida de fondos negociados en la bolsa de bitcoin corre el riesgo de distorsionar el mercado de futuros, al aumentar los costos de los inversores en ETF.

Es un tema urgente, ya que el ETF ProShares bitcoin Strategy (símbolo BITO) acumuló nada menos que u$s1.100 millones en solo dos días después de uno de los lanzamientos más exitosos de la historia.

Fondos negociados en la bolsa de bitcoin corre el riesgo de distorsionar el mercado de futuros, aumentando los costos de los inversores en ETF.

El problema es el costo de renovar continuamente los contratos que tiene el fondo, lo que se conoce como "costo de acarreo" o "cost of carry" en inglés.

Bram Kaplan y Marko Kolanovic, estrategas de JP Morgan, precisaron que solo BITO ya representa una cuarta parte del interés abierto en los contratos de bitcoin de octubre y noviembre. Y vienen más ETF.

 

"Este acarreo de los futuros podría aumentar aún más si estos productos acumulan activos sustanciales. Harán subir tanto la curva de futuros en relación con los precios al contado como las renovaciones entre contratos, lo que generará un mayor costo de acarreo", describieron los expertos según una publicación de Bloomberg.

Desde mediados de 2019, el costo promedio anualizado de renovación entre el segundo y el primer futuro sobre bitcóin fue de aproximadamente el 9%, según los estrategas. Entre el cuarto y el segundo futuro fue por alrededor de 8%.

Eso significa que el costo de acarreo para un ETF basado en futuros sobre el bitcoin podría ser varias veces mayor que las comisiones de administración del producto, según JPMorgan. En el caso de BITO, el ratio de gastos es de 0.95%.

Hay muchos otros fondos que se preparan para salir. Si bien serán administrados activamente y, en teoría, pueden negociar diferentes puntos en la curva de futuros, Kaplan y Kolanovic compararon con la aparición de productos  negociados en bolsa de volatilidad, que crecieron hasta el punto de aumentar sus propios costos.

"Cuanto más posiciones largas de los inversores haya, más caro se vuelve mantener debido al propio impacto de mercado de los ETP", escribieron los estrategas.

Te puede interesar