La semana pasada se conoció que el Registro Nacional de las Personas (RENAPER), organismo estatal encargado de la identificación y registro de las personas físicas que se domicilien en Argentina, habría sido hackeado. Si bien la entidad desechó el rumor de que se haya tratado de un hacker, en el transcurso del martes 19 de octubre salió a la luz el nombre de un usuario, denominado tango11@jabber.no, que habría sido el atacante informático en cuestión.
La agencia es un engranaje crucial dentro del Ministerio del Interior, donde tiene la tarea de emitir tarjetas de identificación nacionales a todos los ciudadanos, datos que también almacena en formato digital como una base de datos accesible a otras agencias gubernamentales, actuando como columna vertebral para la mayoría de las consultas gubernamentales para la información personal del ciudadano.
La noticia se conoció apenas un día después de que diputados nacionales de Juntos por el Cambio, encabezados por Karina Banfi, exigieran que el Poder Ejecutivo brinde explicaciones al Congreso ante las denuncias presentadas por la venta online de una base de datos de parte de la entidad.
Víctor Castillejo Arias, abogado que presentó una denuncia para saber sobre el estado de vulnerabilidad de la base de datos, se comunicó de manera directa con el hacker implicado y le solicito las pruebas.
Para su sorpresa, el usuario denominado Tango11 contaba con datos actualizados, no solo de su vivienda sino que hasta contaba con una foto reciente del abogado.
"Lo grave es que así como tiene mis datos, también los tiene de cualquier ciudadano argentina que se lo requiera. La base de datos se está vendiendo y el Renaper no hacer nada", resaltó el abogado.
Además, el abogado relató: "Yo me mudé a principios de año (marzo) y cambié mi domicilio. Los datos que me proveyó el hacker tienen la actualización de ese cambio de domicilio por lo tanto, la filtración es muy reciente. Todos los datos provistos están bien y se condicen con los que están en mi DNI físico".
Además, Castillejo recomendó cambiar el DNI apenas se pueda, de está manera se pueden evitar dolores de cabeza en un futuro no muy lejano.
"A mi criterio esto confirma que estamos ante la filtración de datos más grande que ha tenido un estado soberano. El Estado argentino debe dejar de usar el DNI y el número de trámite como método de acreditación de identidad inmediatamente", advirtió.