El 2018 fue un año de grandes turbulencias en el ecosistema cripto global. Estos movimientos repentinos y algo bruscos en cierta manera son naturales a una industria que ha tomado un fuerte impulso y eso, por consecuencia, reordena varias piezas de un sistema establecido hace mucho tiempo.
Estos avatares no son nuevos para nosotros, que ingresamos al mundo de las criptomonedas en 2013, una eternidad en términos de esta industria.Lo que sí es nuevo es que estos movimientos hayan tomado cierto estado público masivo esta vez. Y eso es bueno, ya que nos indica que el camino que ha recorrido la industria la ha colocado en un lugar de cada vez mayor relevancia y aceptación.
En los próximos párrafos explicaremos cuáles fueron los cinco hitos clave de 2018 en lo que respecta al mundo de las criptomonedas, con el objetivo de entender por qué la película es usualmente más importante que la foto.
1. Los fundamentos de bitcoin se fortalecen pese a la caída de la cotización. A pesar de las caídas brutales del precio, la cantidad de usuarios, transacciones y demás sigue creciendo ¿Crece la adopción y cae la especulación? Lo cierto es que la gente va comprendiendo muchísimo más el mercado, se va apaciguando un poco esa compra compulsiva por la especulación que depende mucho de la suba y baja, de las noticias que surgen sobre si el bitcoin "es bueno o malo". Los usuarios están más informados, investigan para qué podrían servir las criptomonedas. En el caso del bitcoin, como activo de ahorro o inversión para diversificar ganancias.
2. Se terminó el boom de las ICO. Hace menos de 18 meses desde Ripio fuimos de las primeras empresas en explicar qué son las ICO (Initial Coin Offering, por sus siglas en inglés). En ese momento, se estaba gestando un proceso de consolidación que atrajo a muchas empresas a lanzarse a esta nueva forma de financiamiento. Luego de dos años de crecimiento sin precedentes, esta tendencia parece haber terminado hacia agosto. Cabe destacar que solo unos pocos proyectos (de los miles que surgieron) han presentado un producto terminado y funcionando.
3. Stablecoins. Las criptomonedas "estables" son una nueva tendencia mundial ya que garantizan la estabilidad de su precio al atar su cotización con la de otras monedas fiduciarias (como el dólar estadounidense), reduciendo considerablemente la volatilidad de otros activos digitales. En nuestro caso, en noviembre nos convertimos en la primera opción para una stablecoin con pesos argentinos: Dai, la stablecoin que integramos en Ripio, es una que mantiene su cotización sujeta al precio del dólar (1 Dai= u$s1) y lidera el creciente ecosistema de "criptomonedas estables".
4. Se consolida el ecosistema cripto argentino. Con una creciente adopción local y la llegada de nuevos jugadores, la Argentina sigue siendo uno de los hubs cripto más relevantes de la región y en 2018 esta tendencia se acrecentó. Alianzas, nuevos jugadores, eventos masivos y atracción de capitales son sólo algunos de los elementos que dan cuenta de este creciente atracción del país (y de Buenos Aires, en particular) como uno de los epicentros cripto globales.
5. Llegó la era de la tokenización. Los contratos inteligentes abren la puerta a la tokenización de todo tipo de activos (tanto digitales y no digitales), permitiendo intercambios de valor 100% trazables, inmutables, transparentes y descentralizados. Un fenómeno que crece exponencialmente y apunta a englobar todos los mercados del mundo e incluso a crear nuevos.