El Foro Económico Mundial (World Economic Forum) incluyó en su mapa de Riesgos Globales 2020 a los ciberataques como una de las principales amenazas mundiales. Este año tan particular, el uso de la nube creció (y sigue creciendo) de manera exponencial, pero el problema con el que muchos se encuentran es cómo introducir la seguridad dentro de su proceso de transformación digital.

A veces por perseguir ciertos objetivos, como por ejemplo ser más ágiles y veloces, se descuidan otros aspectos fundamentales y eso puede tener un costo muy alto, exponiéndonos a ciertas vulnerabilidades. Si bien este fenómeno suele ser más común en las empresas que no son nativas digitales, nadie está exento: todos deben estar atentos a los protocolos que nos permiten minimizar los posibles riesgos a la infraestructura, a la información y, más aún hoy en día en que las aplicaciones móviles se usan para casi todo, se debe tener presente que las mismas deben también ser seguras. El ciclo de desarrollo de software debe ser seguro y para eso hay que cambiar la forma en que se hacen las cosas. Implementar cultura Devops y como step ideal, DevSecOps, es el camino adecuado a la securitización de la información.

Hay muchas herramientas a nuestro alcance para proteger la infraestructura de la compañía, pero es primordial estar asesorados por expertos en la materia, ya sean especialistas internos o externos. Ellos podrán acompañar a quienes deciden innovar responsablemente y guiarlos de manera personalizada por el camino correcto. No existen fórmulas universales, pero sí metodologías que ayudan a alcanzar altos niveles de seguridad.

Debemos bregar por un mundo seguro, porque la globalización, y por ende la información que se produce y se usa, recorre hasta los rincones menos imaginables. Un ejemplo sencillo y poco conocido: hoy hasta un velador inteligente, de esos que se usa en un escritorio y uno puede encenderlo desde una app en el celular, "pide" que se permita el GPS de tu celular, para darte las funciones remotas. Raro, ¿no? En verdad, no. Sí todo eso está en un canal seguro, la información será usada para estadísticas y/o publicidad, y no pasará a mayores. Por eso, conocer, implementar y mantener entornos seguros hoy no es negociable y no es solo para empresas, todos deberíamos tender a movernos en entornos seguros.

Las herramientas de colaboración en línea permiten incrementar alrededor de un 30% la productividad. El trabajo remoto implementado de forma rápida puede traer consecuencias si no se tienen en cuenta algunas cuestiones, por lo que hay que tomar los recaudos necesarios y asesorarse con profesionales. Las organizaciones tienen que tener en claro que la cultura del dato y la tecnología van de la mano de la Ciberseguridad, un paso en falso en esta materia puede afectar incluso a los clientes y su reputación, provocando así su pérdida de confianza o en algunos casos dejar expuesta información sensible que resulte en pérdidas millonarias

Hoy en día, la seguridad toma otras dimensiones y atraviesa de manera transversal a todas las áreas de la empresa, se requiere un enfoque integrado y completo. Es imprescindible estar protegidos y tener buenas prácticas para que la organización pueda seguir funcionando de manera segura.

Lo cierto es que no hay transformación si no hay seguridad, y cuanto antes tomemos las riendas y las decisiones necesarias, mejor. La seguridad no tiene que frenar la innovación, sino impulsarla, acompañarla. Esto permitirá que el camino de la transformación digital definido sea el correcto, que aporte valor y, por sobre todo, sea en un entorno seguro.

*Gustavo Orlandau, Director Comercial de Nubiral

Te puede interesar