Diversos estudios señalan que la inteligencia artificial tendrá un impacto profundo en la cantidad de personal que ciertos sectores poseen, sobre todo en el de la banca. Según Autonomous Research, se estima que al menos 1,2 millones de empleos en este sector se perderán hasta 2030. Si bien esta cifra suena exagerada para algunos expertos, lo cierto es que globalmente los bancos están invirtiendo 10.000 millones de dólares anuales en IA.

El ex CEO de Deutsche Bank que la mitad de su personal podría ser sustituido por robots, mientras que Citigroup estima que en cinco años 30% prescindirá del 30% de su personal. Por su parte el grupo japonés Mizuho estima que hasta 2027 serán 19.000 empleados los que sean sustituidos por IA.

Francisco Rodríguez Fernández, Catedrático de Economía de la Universidad de Granada y economista sénior de Funcas estima que hay cierta exageración sobre lo que la IA puede hacer por la banca. En un artículo publicado en CincoDias estima que existen límites importantes para que haya una transformación completa del sector.

"El principal es que el desarrollo de la IA hasta el momento ha sido muy considerable en el terreno predictivo pero no en el cognitivo. Es un error, por lo tanto, poner a humanos y máquinas al mismo nivel en un gran número de procesos. La banca minorista, por ejemplo, es un negocio eminentemente relacional y los actuales asistentes virtuales son, generalmente, poco satisfactorios. Difícil construir relaciones de confianza a partir de ellos." afirma Rodriguez Fernandez.

Según el catedrático el sector más afectado por la IA en banca es aquel que tiene que ver con la automatización de procesos y el de asistencia a decisiones humanas con inteligencia aumentada. Asimismo destaca el avance "en la detección de fraudes en pagos o en transferencias e, incluso, en pautas poco éticas de blanqueo de dinero. Todo sin olvidar, eso sí, que el carácter predictivo pero no cognitivo de algunas de estas tecnologías también podría dar lugar a falsos negativos (créditos denegados a prestatarios solventes o tarjetas canceladas por operaciones erróneamente identificadas como fraudulentas)."

Por último el experto considera que hay que tener muy en cuenta a la IA como parte de la automatización de procesos repetitivos y con escaso componente cognitivo en los que la objetividad debe primar pero "de momento, la IA no incorpora, de forma suficiente, una sustitución del valor relacional." afirmó.

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