Bill Gates, una de las voces más influyentes dentro del ecosistema tecnológico, advirtió sobre el uso de dispositivos celulares en niños y niñas.
Según él, los teléfonos inteligentes transformaron la manera en que las primeras infancias utilizan su tiempo libre e interactúan con sus pares.
A partir de un análisis compartido en su blog personal, basado en la obra del psicólogo Jonathan Haidt, Gates sostuvo que el predominio del celular amenaza:
La visión del cofundador de Microsoft encuentra sustento en su propia experiencia y en estudios recientes que muestran el impacto del teléfono inteligente en la crianza.
"Tuve lo que Haidt llama una infancia basada en el juego. Ahora, una infancia basada en el teléfono es mucho más común", indicó Gates.
Además, detalló cómo la digitalización reemplazó actividades centrales para el desarrollo emocional y cognitivo de los más jóvenes.
Según el empresario, la transformación digital de la niñez limita el pensamiento crítico y la capacidad de concentración, aspectos importantes para el desarrollo personal y profesional en la adultez.
El análisis se apoya en ideas del libro The Anxious Generation, donde Haidt indica que cuando los chicos utilizan celulares y redes sociales a temprana edad, reciben una estimulación constante que reemplaza el tiempo de juego creativo y las interacciones sociales más naturales y espontáneas.
En su lugar, Gates propuso que los niños vuelvan a jugar en plazas y tener actividades al aire libre, algo que les permitirá aprender y relacionarse mejor con otros.
"Sin la capacidad de concentrarse intensamente y seguir una idea a donde sea que lo lleve, el mundo podría perderse los avances que provienen de poner su mente en algo y mantenerlo allí", reflexionó Gates.
Entre sus sugerencias, el magnate recomendó a los adultos responsables esperar a que los chicos sean mayores de edad para entregarles su primer celular, una idea que también apoyan muchos especialistas.
Además, propuso implementar mayores controles de edad en las redes sociales con el objetivo cuidarlos de los contenidos inapropiados.
Su recomendación no es sacarles la tecnología, sino que la utilicen de manera responsable para que puedan desarrollar su autonomía y habilidades a través del juego y la interacción con otros.