El presidente de Mercado Libre Argentina, Juan Martín de la Serna, lanzó una advertencia directa a los gobiernos de la región: el crecimiento explosivo de las plataformas chinas Temu y Shein amenaza con alterar el equilibrio competitivo del comercio electrónico y poner en riesgo miles de empleos locales.
"Es importante tener un buen marco regulatorio que sea igual para todos los que compiten. Las regulaciones son muy importantes, tanto en las finanzas como en el comercio", sostuvo el ejecutivo durante la conferencia anual de la consultora Abeceb, en Buenos Aires.
El reclamo de De la Serna se produce en un contexto de avance acelerado del e-commerce asiático en América Latina, con modelos de negocio centrados en precios ultra bajos, envíos gratuitos y cadenas logísticas globales que operan sin presencia física en los países donde venden.
Para el titular de Mercado Libre, ese esquema distorsiona el mercado: "Cuando abrís el comercio indiscriminadamente y una empresa asiática te manda productos por barco, en realidad estás dando trabajo a compañías chinas, no a argentinas".
¿Es viable una regulación?
El reclamo de Mercado Libre no es aislado. Voces del sector privado y organismos de comercio exterior alertan sobre el riesgo de desindustrialización digital, donde la apertura sin regulación puede convertir a América Latina en un mero mercado de consumo para productos asiáticos.
Para la empresa, la clave pasa por nivelar las reglas del juego: exigir cumplimiento impositivo, trazabilidad de productos, estándares laborales y controles aduaneros uniformes para todos los actores.
"Toda la reciente tensión entre bancos y fintech era precisamente por algo similar. Algunos que determinadas obligaciones y otro no. Llama mucho la atención el pedido de Mercado Libre", asegura a iProUP el especialista en medios de pago, Jorge Larravide.
El experto no cree viable una regulación por parte del gobierno: "Si el objetivo es cuidar a las PYMES o a los consumidores, como pidió MELI, podrían empezar por bajar comisiones".
En cuanto a la calidad de los productos publicados en plataformas como Shein, Larravide entiende que hay opciones de todo tipo de calidad: "El consumidor puede elegir lo que se ajuste a su bolsillo".
"Hay más jugadores en la cancha. A muchos les gusta decir "la competencia nos eleva". Debería ser ese el criterio, ya que Mercado Libre opera en 18 países y compite fuertemente con Amazon, por ejemplo. Ahí tiene que desarrollar otra estrategia", advierte Larravide.
Sobre una eventual regulación (que el entrevistado, de nuevo, no ve aplicable en el actual contexto) esto dice el experto: "No sé cómo se podría materializar. Tal vez con alguna tasa extra, lo cual también sería raro. ¿Una especie de derecho de importación si viene de Shein o Temu, pero no si viene de otra plataforma?".
Las compras en Temu crecen de forma imparable
Según datos de la firma de inteligencia Sensor Tower, los usuarios activos mensuales de Temu en América Latina crecieron 143% interanual durante el primer semestre de 2025, superando los 105 millones de personas. La aplicación, que combina precios extremadamente bajos con una estrategia de marketing agresiva, se convirtió en una de las más descargadas de la región.
Para De la Serna, esta tendencia impacta de lleno en el ecosistema que Mercado Libre construyó en más de dos décadas: "Las pequeñas y medianas empresas representan cerca del 90% del volumen de ventas en nuestra plataforma, y son ellas las que podrían verse más afectadas por la llegada masiva de importaciones baratas y de baja calidad".
El ejecutivo advirtió que el fenómeno "corre el riesgo de socavar el tejido productivo local y poner en peligro los empleos en la región", en un momento en que la creación de trabajo formal vinculado al comercio digital había mostrado avances tras la pandemia.
De Amazon a China: dos desafíos muy distintos
De la Serna comparó el impacto de los nuevos jugadores chinos con la llegada de Amazon a Brasil hace una década. Aquella competencia, aseguró, "nos obligó a subir el listón y ser más agresivos, pero dentro de un marco competitivo saludable".
En cambio, consideró que el desafío actual es de otra naturaleza: "Lo que nos parece importante es diferenciarnos. Generalmente, estas empresas asiáticas venden productos de baja calidad".
Esa diferencia estructural es, a su juicio, el eje del debate. Mientras Amazon expandió el ecosistema digital de la región, Temu y Shein operan sobre una economía paralela, con producción y empleo fuera del continente, sin aportar al entramado industrial local ni a los sistemas de control y trazabilidad.