El presidente del gigante del norte se volvió a quejar sobre la supuesta parcialidad contra los conservadores que nota en las redes sociales
27.06.2019 • 10:04hs • Objeción!
Objeción!
Tensión en alza: Donald Trump quiere llevar a juicio a Facebook y Google
Donald Trump se quejó nuevamente de una supuesta parcialidad contra los conservadores por parte de las compañías de redes sociales, por lo que considera que su gobierno debería demandar a Google y Facebook por irregularidades que no fueron especificadas por el mandatario.
En una entrevista con Fox Business Network realizada el miércoles, Trump considera que las redes sociales están manejadas por demócratas y que Twitter pone trabas de alguna forma para que los usuarios puedan seguir su cuenta @realDonaldTrump, desde la que emite sus declaraciones como mandatario asiduamente. Por estas razones el presidente considera que Estados Unidos debería demandar tanto a Google como Facebook, por lo que llegó a deslizar un "tal vez lo haremos", sin decir cuáles serían las razones de la posible demanda.
Desde las compañías de redes sociales afirman que tratan de controlar todo lo que consideran discursos de odio y cuentas fraudulentas y que no tienen políticas en contra de los conservadores. Sin embargo, la amenaza de Trump no viene de la nada: Project Veritas, organización conservadora que suele publicar videos de cámara oculta editados engañosamente, publicó esta semana imágenes en las que un empleado de Google supuestamente dice que la empresa quiere evitar que Trump sea reelecto.
A partir de la exención de responsabilidad por el contenido de los usuarios que las redes sociales tienen, los expertos no saben qué podría hacer el gobierno contra las compañías que las manejan. Desde altas esferas del Congreso sugieren limitar esa protección como respuesta a las acusaciones de parciales y delitos similares, aunque poco se hizo luego de haberse restringido la protección en casos de tráfico sexual.
El gobierno no tiene muchas posibilidades para imponer qué noticias deben presentar los editores a pesar de las amenazas del presidente de usar el poder que tiene para frenar todo lo que se diga que no le gusta.