Las empresas fabricantes de dispositivos móviles compiten todo el tiempo para alzarse como la más innovadora del momento: mejores cámaras, procesadores y pantallas desfilan constantemente por los grandes eventos de presentación. Pero parece que la batalla se prepara para librarse en un nuevo frente.
Con el lanzamiento la familia Mate 20, Huawei quiere arrebatarle la corona a Samsung como el mayor proveedor de teléfonos a nivel global. Y este año, la gran revelación fue el procesador Kirin 980 de la marca.
¿Qué tiene de novedoso? Además de ser el primer procesador de 7 nanómetros para Android (con ocho núcleos y 6900 transistores en 1cm2), este equipo incorpora dos unidades de procesamiento neuronal. Esto busca mejorar la inteligencia artificial de los equipos mediante reconocimientos de imágenes con una mejora del 120% con respecto a su predecesor.
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Además, da un salto considerable en la optimización de recursos, rendimiento energético y potencia. Esto es posible, también, por la incorporación de la placa Mali-G76 que, según la firma, ofrece un 46% más de rendimiento en la ejecución de gráficos y un 178% más de eficiencia energética.
Otro punto destacado que se beneficia de la IA es el apartado fotográfico. Con un sistema de triple cámara, estos equipos de Huawei aprovechan la inteligencia artificial para tomar imágenes y grabar videos con “calidad cinematográfica” y, al igual que Google y Apple, la compañía apuesta por la fotografía computacional para mejorar y optimizar las imágenes de forma automática.
Por último, la IA se puede utilizar como un asistente para reconocer fotos de alimentos y calcular sus calorías o, por ejemplo, capturar una remera y buscar el producto entre cientos de ecommerce online.
De esta forma, Huawei da un gran paso adelante en la incorporación de esta tecnología en la búsqueda de masificar la IA.