El Ministerio de Economía enfrentará esta semana un desafío central: renovar vencimientos de deuda por $7,2 billones, en un contexto marcado por la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires.
El monto original a cubrir era de $16 billones, pero dos canjes de títulos entre el Tesoro y el Banco Central (BCRA) redujeron la cifra final, indicó la agencia Noticias Argentinas.
La operación quedó oficializada en la Resolución Conjunta 42/2025, y ahora será la Secretaría de Finanzas, a cargo de Pablo Quirno, la que defina qué instrumentos ofrecerá a bancos y fondos de inversión.
En la última licitación, el Gobierno tuvo que convalidar tasas de hasta 4,81% mensual en deuda a corto plazo y de 3,53% en bonos con vencimiento en 2026, reflejo de la presión que ejercen las entidades financieras.
Con la caída electoral en PBA, ese margen se achicó todavía más: los bancos reclaman mejores rendimientos y garantías de estabilidad.
El propio jefe de Gabinete, Guillermo Francos, admitió que el ajuste macro "no llegó a la microeconomía", lo que abre un interrogante sobre la capacidad del Ejecutivo de dar señales de confianza en el corto plazo.
Con incertidumbre política y tasas en alza, la renovación de deuda de esta semana se transformó en una verdadera prueba de fuego para Luis Caputo.
Respecto, precisamente, al ministro de Economía, aseguró, tras el revés electoral, que no habrá modificaciones en las metas fiscales, monetarias ni cambiarias.
"Nada va a cambiar en lo económico. Ni en lo fiscal, ni en lo monetario, ni en lo cambiario. Un abrazo a todos", escribió en un breve posteo de X tras conocerse los resultados.
En paralelo, Milei habló desde la sede partidaria y reconoció la derrota: "Hemos tenido un revés electoral y hay que aceptarlo", dijo.
Al mismo tiempo, responsabilizó al aparato peronista que gobierna la provincia hace más de 40 años y confirmó que el programa económico se mantendrá intacto.
"No se va a modificar, se va a redoblar", aseguró el mandatario, al tiempo que defendió el equilibrio fiscal, el esquema cambiario y las medidas de desregulación. También adelantó que el oficialismo encarará una autocrítica de cara a las elecciones nacionales del 26 de octubre: "Aquellas cosas en las que nos hemos equivocado las vamos a corregir. No hay opción de repetir los errores".
Con este doble mensaje, tanto Caputo como Milei buscaron enviar una señal clara a los mercados y a los inversores: pese a la derrota política, el plan económico no sufrirá modificaciones.