El empresario ítalo-argentino Cristiano Rattazzi volvió a la Argentina luego de tres meses en Europa y lanzó una reflexión lapidaria: "El país está mucho más complicado de cuando me fui".
Pese a su contundente diagnóstico, el CEO del Grupo Modena respaldó algunas decisiones del gobierno de Javier Milei y volvió posicionarse a favor del rumbo económico.
Sin embargo, también advirtió sobre la vulnerabilidad de la economía, la desconfianza que percibe en los mercados y el crecimiento del riesgo país, que llegó a los 1.300 puntos, poco después de sus declaraciones.
Sobre el panorama financiero, explicó: "Cuando el riesgo país se va arriba de mil doscientos y pico, veo una frenada de todos en la confianza en la Argentina. Y eso es grave".
Y agregó: "Las tasas de interés están demasiado altas, eso frena".
Rattazzi habló del tipo de cambio y defendió la necesidad de que sea libre: "El dólar tiene que ser libre y tener un valor que lo fija el mercado. No hay ninguna razón de espantarse porque el dólar esté un poco alto".
Rattazzi calificó de "genial" el inicio del plan económico del Gobierno y dijo que el primer año "funcionó extraordinariamente", en una entrevista radial con Eduardo Feinmann por radio Mitre.
Aunque valoró el plan económico del Gobierno, Rattazzi advirtió que llegó el momento de implementar ciertos ajustes para consolidar los avances: "Hay que saber dar ciertos ajustes cuando las cosas no andan tan bien. Cuando el Fondo te da plata para comprar reservas, comprá reservas. No pidas que el dólar baje más".
El empresario también halagó al presidente: "Milei es un genio en el sector económico. Tiene un pensamiento extraordinario, está preparadísimo. Pero la victoria te marea un poco. Hay que ver las cosas que todavía no están arregladas".
En cuanto al clima del debate público, Rattazzi pidió moderación: "La soberbia y la ira no es buena consejera. Insultar a la gente, enojarse no sirve. El mundo sigue adelante. Hay que hablar con todo el mundo."
También defendió el trabajo y el rol de la prensa: "El periodista puede disentir, puede pensar de otra manera. Tiene que tener su libertad de pensamiento, hace parte de su función".
Finalmente, cuestionó algunas prácticas legislativas: "Que el Congreso pueda votar leyes sin decir de dónde viene la financiación, no, eso ya es un disparate. No se puede legislar contra el Gobierno".