El mercado cripto inició la semana con caídas moderadas y una fuerte dosis de volatilidad que volvió a poner a las ballenas en el centro de la escena. Los grandes jugadores realizaron operaciones multimillonarias en Ethereum (ETH), Bitcoin (BTC) y una serie de altcoins que reflejan una estrategia de acumulación selectiva y toma de ganancias.
ETH se consolidó como la criptomoneda más demandada por las ballenas. Según datos de OnChain Lens, el inversor identificado como 0x7451 recibió más de 13.000 ETH desde FalconX, sumando en cuatro días una posición cercana a los 22.556 ETH (unos u$s105 millones).
En paralelo, otros monederos recién creados retiraron miles de tokens desde exchanges como Binance y OKX.
Sin embargo, no todas fueron compras: una dirección descargó más de 5.100 ETH a pérdida, evidenciando que también hay movimientos impulsivos en el mercado.
En BTC, un histórico inversor que semanas atrás había intercambiado casi 36.000 BTC por ETH volvió a escena al depositar más de 1.100 BTC (u$s136 millones) en Hyperliquid para iniciar ventas.
La operación generó presión bajista y marcó una pausa en el rally del principal criptoactivo.
Más allá de BTC y ETH, el foco se trasladó hacia altcoins emergentes:
Galaxy Digital, la firma de Mike Novogratz, intensificó su apuesta por Solana (SOL) con compras por más de u$s1.500 millones en apenas cinco días. Además, ballenas movieron grandes volúmenes de PUMP, donde algunos inversores duplicaron su inversión inicial en pocas semanas.